1. Lava tus manos varias veces al día, sobre todo usando jabones neutros, que no contengan mucho detergente. Dale especial importancia a limpiar el interior de tus uñas y la hendidura entre dedo y dedo.
2. Mantén tus manos siempre hidratadas. ¿Y cómo? Aplicando cremas de manos hidratantes. Notarás como la piel de tus manos se vuelve más lisa y elástica.
3. Tras cortar tus uñas, límalas siempre. Así evitarás que se rompan o se enganchen con facilidad. Por supuesto, nunca No limes la superficie de la uña pues conseguirás que se debilite y quiebre con mucha más facilidad.
4. También es importante cuidar tus cutículas, para ello, ayúdate con una palito de naranjo y retira las incómodas pieles sobrantes.
5. Cada 10 días, exfolia tus manos. Puedes probar un método casero, utilizando sal gorda y dando enérgicos masajes para eliminar las pieles muertas. ¡Notarás cómo muestras unas manos suaves y sin imperfecciones!