Amueblar el hogar es una de las experiencias más esperadas dentro de la decoración y distribución de la sala, oficina y habitaciones. El sofá es el protagonista debido a que contribuye al descanso y relajación de los miembros del hogar y la visitas. Por eso es importante escoger el sofá perfecto y que cumpla con la comodidad, resistencia y funcionalidad en cualquier espacio. También debe adaptarse a las actividades que se realizarán como leer, tomar una siesta, ver los partidos de fútbol o recibir clientes en la oficina.
¿Cómo escoger el sofá perfecto para descansar?
En las tiendas hay muchos tipos de sofás ajustados a los diferentes espacios; ya sea para una sala, oficina o habitación solo hay que considerar el tamaño del espacio y su decoración. Están los sofás de dos a cinco puestos y el chaise longue para tamaños reducidos con estilo minimalista, por ejemplo. Por su parte, el sofá cama y el futón son multifuncionales, por lo que destacan en una oficina o espacio de juegos. El diseño es importante si será un sofá meramente decorativo, pero si predomina la funcionalidad y confort se recomienda elegir basándose en estos factores:
Tamaño adecuado
Tener un sofá muy grande en un espacio pequeño no queda bien, emite la sensación de agobio y saturación. Lo mejor es un sofá a la medida como los sofás en forma de “L” que aprovechan las esquinas y rincones, o en forma de “U” para una vivienda de mayor amplitud.
Tapicería resistente
La resistencia de un sofá es la clave para que perdure por años, siendo necesario los materiales de lona, algodón, chenilla o cuero. Estos aumentan no solo la durabilidad, sino la comodidad.
Colores neutros
Si bien el color depende de los gustos y la decoración, los sofás en tonos neutrales se adaptan a cualquier personalidad y prolongan el descanso, al no tener tonalidades que sean estimulantes o enérgicas. Además, combinan muy bien con fundas y cojines de diversos colores.
¿Por qué tener un sofá perfecto en el hogar?
Son muchas las ventajas de un sofá perfecto en el hogar, ya que satisface todas las necesidades de la familia sin olvidar la estética y decoración. Ayuda a desconectarse del estrés diario porque relaja el cuerpo, cuidando la postura y creando una sensación de confort. El sofá perfecto es ideal para recuperar la energía, practicar la lectura o ver televisión mientras se estiran los pies.
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