- Pero si me pides que me quede, caminaré de largo. Sin cerrar la puerta.
- La esperó tanto que al momento de arreglarse para su cita, no quedaban cabellos que peinar.
- Entonces decidió ponerle fin a todo, todo resultó ser nada.
- Hay otros peces en el mar- se dijo. No volvió a salir de pesca.
-Y.