Autor: doctoranytime
¿Está considerando iniciar un tratamiento para cambiar la tonalidad de sus dientes y volverlos más blancos? Usted no es el único, ya que el blanqueamiento dental es uno de los tratamientos estéticos más populares en los últimos años. Ya sea por encajar en los estándares de belleza, darle un giro a su imagen o simplemente hacerse un cambio para mejorar su autoestima, es totalmente aceptable y normal querer saber más sobre este tratamiento. No solo es importante conocer quién lo lleva a cabo o cuáles son los cuidados que se deben de tener después de acabarlo, ya que este tratamiento puede afectar otros puntos de su vida. Sus ventajas son muy conocidas pero, ¿ya sabe de las consecuencias que puede traer un blanqueamiento dental? Nosotros se lo explicaremos a profundidad en este artículo.
Definición de blanqueamiento dental
El blanqueamiento dental es un tratamiento que se hace con un odontólogo por fines estéticos, ya sea por cambiar la coloración de nuestros dientes o eliminar ciertas manchas que se han hecho con el paso del tiempo. Lo primero que se debe de hacer es acudir con un especialista que tenga experiencia haciendo este tipo de tratamientos, ya que de esta forma nos aseguramos de recibir una buena atención y tener un resultado satisfactorio.
Posteriormente, su médico hará una revisión de su dentadura para explorar las manchas que tendrán que ser removidas y si hay algún problema que se deba de tratar previo al inicio del blanqueamiento. Hay que tener en cuenta que se debe de suspender el consumo de tabaco y alimentos con propiedades pigmentadoras antes y después de este proceso.
¿En qué consiste?
El primer paso para iniciar el blanqueamiento es que el paciente acuda al consultorio o clínica donde eligió iniciar su tratamiento, donde se le explicarán los pasos del procedimiento y los cuidados posteriores que debe de tener para que el resultado se preserve por el mayor tiempo posible. Después, se protegerán las encías. Este paso es importante dado a que estas se pueden ver afectadas por el agente blanqueador o la luz fría que se utilizará en los siguientes pasos.
Ahora se colocará un agente blanqueador, cuya presentación más común es en gel, que servirá para empezar a cambiar la coloración de los dientes. Se pasará una herramienta que lanza luz fría para agilizar el proceso y que se logre la tonalidad que se discutió previamente con el paciente.
Estas son las consecuencias del blanqueamiento dental
Lo primero que los pacientes notan tras finalizar su tratamiento es que sus dientes son más sensibles que antes. Esto no debe de causar gran preocupación , ya que es totalmente normal. Puede evitar esta incómoda sensación eliminando temporalmente la ingesta de alimentos o bebidas que sean muy calientes o muy frías. Sus dientes han pasado por todo un proceso y manipulación, así que unos días de descanso los ayudará a regresar a la normalidad.
Por otro lado, la irritación en las encías también puede aparecer posterior al blanqueamiento. Sin embargo, en caso de que presente inflamación en las mismas, será necesario expresarle su molestia al médico y tal vez interrumpir temporalmente el tratamiento para evitar un daño más grande. Si nota quemaduras en sus encías u otra parte de la boca, también es recomendable acudir con un médico inmediatamente. Esto puede suceder si alguno de los componentes que se usaron estaba en mal estado o no era de muy buena calidad.
La mayoría de estos efectos secundarios desaparecerán con el tiempo pero se debe prestar especial atención a cualquier cambio brusco, ya que puede ser una señal de que algo anda mal. Por otro lado, los cuidados posteriores como lavarse los dientes dos veces al día o acudir a revisiones odontológicas cada año, ayudarán a que no presente problemas que afecten a su salud bucal.
Referencias: