Descubre los síntomas de la leucemia

Al principio te sientes cansado, te estresas y comienzas a sentirte mareado, te sientes débil y los resfriados se vuelven más frecuentes y más agresivos. Así es como comienza la leucemia, una enfermedad cuyas causas no comprenden completamente los médicos. Una vez que recibes los análisis de sangre, obtienes más preguntas en lugar de certezas, porque el diagnóstico de leucemia no es tan fácil de establecer.

Se necesitan pruebas complejas, muchos viajes al médico, muchas intervenciones, porque las infecciones ocurren mucho más fácilmente en un sistema inmunológico debilitado.

Anemia: causas, síntomas, tipos

Ahora nos detendremos en los síntomas que pueden ocultar una forma de leucemia y en los tratamientos actuales, especialmente la inmunoterapia, que pueden ocupar el lugar en el futuro de las agresivas sesiones de quimioterapia que enfrentan los pacientes con cáncer de sangre.

Tipos de leucemia

La leucemia es un término al que tememos solo cuando lo escuchamos. ¿Qué tan peligroso es y cuántos tipos de leucemia hay?

La leucemia aparece cuando hay demasiados glóbulos blancos, en otras palabras, la médula espinal produce demasiados leucocitos. En muchos casos, estas células ingresan a la sangre, pero también hay casos en los que estas células se adhieren a la médula ósea y reemplazan a las restantes sanas. En un análisis de laboratorio, podemos ver lo contrario: el nivel de leucocitos es normal o incluso muy bajo.

Hasta la fecha se han diagnosticado formas crónicas y agudas de leucemia. Dependiendo de cuán afectada esté la médula ósea se dividen en: leucemia mieloide, linfoide, etc., pero también en leucemia con células maduras o inmaduras. 

Los tipos más comunes son: leucemia linfocítica (representa el 30-40% de todas las formas de leucemia), leucemia mieloide crónica, leucemia mieloide aguda y leucemia linfoblástica aguda. En el extremo opuesto, los tipos más raros son la leucemia de células pilosas y la leucemia de células plasmáticas (2-4%).

¿Cuáles son los síntomas más comunes de la leucemia y cuándo debemos ver a un médico?

Es posible que nos demos cuenta de que algo anda mal y deberíamos consultar a un médico lo antes posible cuando nos ocurra una o más de las siguientes situaciones:

  • anemia (nivel bajo de eritrocitos o glóbulos rojos) que produce un estado de debilidad, dificultad para respirar, palidez y pulso muy rápido.
  • trombocitopenia (niveles bajos de plaquetas o plaquetas en sangre) que causan sangrado, con mayor frecuencia en la piel o la nariz.
  • infecciones, fiebre o infecciones gingivales causadas por niveles bajos de glóbulos blancos.

En algunos casos de leucemia, otros signos para un diagnóstico correcto serían el aumento y el tamaño anormal del hígado , el bazo o los ganglios linfáticos. Debe acudir al médico de inmediato si siente una debilidad inexplicable, dificultad para respirar, sudoración nocturna, palidez de la cara, fiebre que no disminuye con los antibióticos, agrandamiento de los ganglios linfáticos o anomalías de las encías. En este punto, debe consultar a un médico para que le realice una serie de análisis de sangre.

El primer paso en el diagnóstico se da controlando la sangre: midiendo las células e incluso el análisis diferencial de la sangre (análisis de glóbulos blancos: número, forma, etc.). Si los valores son normales, hay pocas posibilidades de leucemia. Pero si ocurren anomalías, la recomendación es acudir a un hematólogo.

¿Qué importancia tiene el diagnóstico temprano?

Las leucemias crónicas progresan lentamente, por lo que el examen de la médula espinal puede retrasarse unos días. Sin embargo, en el caso de las leucemias agudas, el diagnóstico y el tratamiento son necesarios lo antes posible, ya que los pacientes pueden morir a los pocos días debido a infecciones muy graves, hemorragias en el cerebro o insuficiencia orgánica.

¿Cuáles son los tratamientos estándar para la leucemia?

ara cada tipo de leucemia existe una amplia gama de terapias, pero se necesita un tratamiento personalizado, estrechamente relacionado con el historial médico del paciente, porque cada individuo tiene una enfermedad de leucemia específica. No podemos hablar de un procedimiento común para todos los tipos de leucemia.

Sin embargo, la quimioterapia citotóxica sigue siendo el tratamiento principal para las formas de leucemia aguda, a veces incluso en asociación con el trasplante de células madre. 

Cada vez aparecen más estrategias de tratamiento, así como nuevas moléculas, incluso en este momento se están realizando estudios. Por tanto, se necesitan centros de oncología bien pensados, es decir, no solo con especialistas en oncología, sino también del resto de disciplinas médicas, para abordar al paciente de forma individual.

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