En mi primer review les muestro Ex-machina. Empieza como un thriller inquietante sobre un joven programador(Domhnall Gleeson) visitando un carismatico programador (Oscar Isaac) y poco a poco va aprendiendo que el deseo del científico para crear inteligencia artificial lo lleva a un estilo de vida algo extravagante y preocupante.
El científico, Nathan de Isaac, ha traído el programador Caleb (Gleason) a su remoto hogar / laboratorio en las montañas boscosas y manda a Caleb a interactuar con un prototipo de un robot «hembra», Ava (Alicia Vikander), para determinar si realmente tiene conciencia, o es sólo una simulación increíble. La historia es emocional e íntimo, a veces sofocante, que se desarrolla alrededor de la fortaleza de Nathan. Este búnker modernista está aislada del mundo exterior, muchas de sus habitaciones están fuera del alcance de la tarjeta de acceso de Caleb. Conversaciones de Caleb con Ava se presentan como secciones narrativas discretos, titulado igual que los capítulos de un libro. Estas secciones se intercalan con escenas entre Caleb, Nathan, y Kyoko (Sonoya Mizono), una mujer casi muda, frágil, que esta cerca de los dos hombres.
En todo momento, Garland acumula la tensión lentamente y con cuidado sin dejar que el ritmo se detenga. Y él muestra tener un ojo preciso para la composición, haciendo hincapié en los seres humanos y los robots como figuras encantadoras pero preocupantes en el fuerte mural frío, de la tecnología. Los efectos especiales son algunos de los mejores jamás hecho en este género, tan convincente que dejará maravillado al que lo vea, por ejemplo los «huesos» metálicos de Ava se pueden ver a través de la carne transparente de sus antebrazos, o la forma en que su «cara» esta conectada a un craneo plateado.
El guión de Garland es igualmente impresionante, tejiendo referencias a la mitología, la historia, la física y las artes visuales en conversaciones casuales, en formas que demuestran que Garland entiende lo que está hablando a la vez que va a la molestia de explicar los conceptos más abstractos en un lenguaje sencillo, para atraer en lugar de alejar a los espectadores casuales. Las actuaciones son excepcionales. Isaac, en particular, tiene una calidad de estrella electrizante, cruelmente burlón pero de alguna manera insinuante e intelectualmente creíble. El final, cuando llega, es últimamente satisfactorio,y emocionalmente abrumador. Esta es una de esas película que son buenas para reflexionar al final y te dejan pensando.
la comunidad de Rottentomatoes le ha dado a esta pelicula un puntaje de 85