• Antipasto: Uno de los platos más sofisticados de la cocina italiana, principalmente por su presentación, y porque los ingredientes pueden variar para acomodarse a lo que tienes en tu despensa. Puede llevar coliflor, cebolla, apio, pepino, zanahoria, aceitunas negras y/o verdes, champiñones, atún, pasta de tomate y vinagre, pero tú puedes agregar los que consideres o quitar los que te parezcan innecesarios, dependiendo de los gustos de tu familia.Para preparar esta delicia, tienes que dejar en remojo los ingredientes desde el día anterior: pon la coliflor, la cebolla, el pepino y el apio en agua con sal durante 8 horas como mínimo, es decir, toda la noche. Haz el mismo proceso con la zanahoria, pero en un tazón aparte.

    Al otro día, llévalos a freír en una sartén con aceite vegetal, vinagre, pasta de tomate y, si lo deseas, también alguna salsa picante. Deja que hierva durante 10 minutos. Después, agrega el resto de ingredientes y después de un rato sácalos del fuego para pasarlos a la nevera. Espera media hora y sírvelo con pan. Este plato funciona como entrada o como plato principal, todo dependerá de la ocasión.

  • Pan de ajo: Aunque no es un plato central, puede ser un ‘snack’ ideal, si se prepara correctamente. Necesitas pan italiano, orégano seco (1 cucharada), sal y pimienta, queso mozzarella, aceite de oliva, ajo macerado y mantequilla.Pon a calentar una parrilla, mientras tanto, corta el pan en tajadas gruesas, que no superen los 3 centímetros. En un tazón mezcla mantequilla, aceite de oliva, ajo, orégano, sal y pimienta, y espárcela en las tajadas. Llévalas a la parrilla y déjalas dorar durante 5 minutos, sin dejar que se quemen. Retíralas, ponles queso mozzarella al gusto y llévalas de nuevo a la parrilla, para que se derrita. Sírvelas, y decora con alguna especia, puede ser con un poco más de orégano.
  • Gnocchi: Es un platillo que se prepara a base de papa, uno de los grandes favoritos vegetarianos, que además es muy fácil de hacer. Se requiere 1 taza de hojuelas de papa secas, 1 huevo fuera de su cáscara, pimienta y harina multiusos.Para empezar, lleva las hojuelas de papa a una olla con agua hirviendo, déjalas remojar hasta que se conviertan en una mezcla homogénea. Aparte, en un tazón, agrega el huevo, la sal y la pimienta al gusto, y adiciona harina para crear una masa compacta. Amásala ligeramente y divídela por la mitad. Después, haz rollitos largos y delgados con cada una de las mitades, y luego córtalas con un cuchillo para que tengan un tamaño de 3 centímetros de largo, aproximadamente.

    Por último, lleva los trocitos al agua hirviendo, y una vez floten, retíralos con una cuchara. Sírvelos con un poco de queso o con la salsa que desees.