Hermes. El dios de los viajes, heraldo de los dioses para los hombres.

Iconografía de Hermes

Se le representa calzado con sandalias aladas, cubriéndose la cabeza con un sombrero de ala ancha (el pétaso) y empuñando el caduceo (una vara de oro), símbolo de sus funciones de heraldo de los dioses. Con fercuencia lleva un cordero a hombros ("Hermes Crióforo"). Puede aparecer con la lira la flauta (o siringa), instrumentos que inventó.

Mitología de Hermes

Hijo de Zeus y Maya, la más pequeña de las Pléyades. Nació en una caverna del monte Cileno, al sur de Arcadia. Maya lo había concebido por obra de Zeus en plena noche, mientras dormían los dioses y los hombres. Hermes vino al mundo el cuarto día del mes, y este día le quedó consagrado, su nacimiento fue normal pero ya daba muestras de una precocidad extraordinaria: consiguió desatarse de las bandas con que se envolvía a los recién nacidos y escapar hasta Tesalia, donde su hermano Apolo pastoreaba los rebaños de Admeto.

El culto a Hermes

Pasaba por ser el dios del comercio y también del robo. Guiaba a los viajeros por los caminos. Velaba por los pastores. Acompañaba a los Infiernos a las almas de los difuntos, función que le valía el nombre de Psicopompo, el Acompañante de las almas. Se le consagra el cuarto día del mes, día e su nacimiento.