Calar/catar el melón: (Calar a alguien||Tener a alguien bien calado) Tantear o probar algo o a alguien con el fin de intuir qué puede depararnos. Yo creo que vamos a hacerle un contrato de tres meses antes de hacerle el definitivo. Es mejor calar el melón. Es bastante frecuente que en algunos puestos los melones y las sandías se vendan a cala, es decir, cortándolos y probándolos (catándolos) previamente para que el comprador esté seguro de que están en el punto de madurez y de sabor. Con el mismo significado se usa el vebo calar referido a personas: Te puedo asegurar que Ambrosio es un tipo de lo más falso. Créeme, que lo tengo bien calado. V. Como cuchillo de melonero.