HUMOR
enero 27th, 2009LA HORMIGA INCREDULA
Llegó una hormiguita golpeada, lastimada y con muy mal aspecto junto a sus compañeras. Entonces, una de sus amigas le pregunta muy asustada:
Pero, ¿Qué te ha sucedido?
La hormiguita responde sin pensar dos veces:
Me pegó el elefante.
La amiga sorprendida dice:
¿Te pegó el elefante? ¡Eso no es posible!
La hormiguita lesionada le responde a la incrédula:
¿No me crees?, vamos junto a él y te lo confirmará.
Luego de una pequeña caminata llegan junto al elefante y la amiga pregunta al elefante:
¿Es verdad que usted golpeó a esta hormiguita?
El elefante respondió:
¡Así es, para que empuja!
EN EL HIPER
Dos caballeros que se movían muy de prisa en el interior de un hipermercado con sus carritos de compras se chocan. Uno le dice al otro:
Perdóneme usted, es que busco a mi señora.
¡Que coincidencia! Yo también, estoy ya desesperado.
Bueno, tal vez le pueda ayudar.
¿Cómo es su señora?
Es alta, de pelo castaño claro, ojos verdes, piernas bien torneadas, en fin, muy bonita, ¿Y la tuya?
Con esa descripción, olvídate de la mía, vamos a buscar la tuya.
CONFERENCIA
En una conferencia sobre el alcoholismo, el orador hace una muestra a los presentes para poner en claro sus ideas: coloca dos vasos sobre la mesa, uno con agua y otro con whisky. Toma un gusanito y lo coloca en el vaso con agua; el gusanito comienza a nadar y dar vueltas en el agua libremente. Luego, el orador lo coloca en el vaso con whisky, e inmediatamente da varias vueltas y revoltijos y se vuelve un puro ocho y se muere derechito. Todos los presentes se quedan asombrados, a la vez que el orador dice:
¡Eso es lo que hace el alcohol en nosotros, mata nuestras células!
Al decir esto, un borrachito se levanta y dice:
¡Yo no estoy de acuerdo!
¿Y usted qué opina?
A lo que el borrachito contesta:
¡Que el alcohol mata nuestros parásitos!
MATEMATICAS
Viene la maestra y le dice a los alumnos:
Resuelvan este problema de matemáticas: Hay cinco chanchitos en una granja y se escapan dos, ¿Cuántos quedan?
Todos los alumnos gritan sus respuestas:
10, 5, 8, 7, 4….
Como Pepito estaba callado la maestra le dice:
Usted, usted, ¿Cuántos chanchitos quedan?
Pepito se queda pensando un momento y dice:
¡Ninguno!
A lo que la profesora pregunta:
¿Por qué ninguno?
¡Usted cree que van a ser tan tontos, si se escapan dos se salen todos!