Cuando quedan pocas semanas para el lanzamiento oficial de Windows 7, el próximo sistema operativo de Microsoft, uno de los directivos de la compañía ha reconocido que Vista no fue un buen producto.
El comentario quizá no sorprenda ni a los analistas ni a los usuarios, quienes han condenado a Windows Vista desde 2007 como un sistema operativo lento y pesado. Sin embargo, es la primera vez que un directivo de primera fila de Microsoft critica públicamente a Vista.
“Lo que la gente subestima es la importancia de un de los buenos o malos productos”, señala Charles Songhurst, director general de estrategia corporativa de Microsoft en una conferencia con los inversores. “A veces tus productos son buenos, y a veces malos. Creo que Vista no fue un buen producto para Microsoft”.
Windows 7, por su parte, sí que es un buen producto, según argumentaba Charles Songhurst. “Windows 7 es un producto extremadamente bueno, ha sido desarrollado de manera brillante y creo que, seguramente, la gente subestimará los efectos de los malos y los buenos productos”.
Hasta ahora, los principales ejecutivos de Microsoft no habían criticado de manera tan explícita a Windows Vista y sólo lo habían comparado con Windows 7, asegurando que éste es una versión mejorada del primero. Hace unos meses, Stephen Sinofsky, que lidera el desarrollo de Windows, reconocía que habían aprendido de los errores cometidos con Vista para no repetirlos en Windows 7.
En otro orden de cosas, Songhurst descartó la idea de que Apple y Google, con sus respectivos sistemas operativos (Mac OS y Chrome OS), supongan una amenaza para el liderazgo de Microsoft en este mercado. “Apple tiene dos grandes ventajas respecto a nosotros”, reconoce Songhurst. “La primera es su integración vertical: puedes ofrecer una calidad de experiencia mayor cuando tienes una integración vertical que cuando eres un jugador horizontal”. La otra cara de esta moneda es la limitación que tiene Apple a la hora de que las empresas adopten masivamente su sistema operativo.
Respecto a Google Chrome OS, Songhurst se mostraba optimista sobre lo que Microsoft puede hacer para frenarle. “Dado que Chrome OS todavía no existe, es difícil decir mucho sobre él”, empezaba Songhurst. “Si llega y se convierte en el sistema operativo más increíble del mundo, y hace cosas que nadie más hace, entonces Microsoft tendrá un problema. Pero si se convierte en algo parecido a nuestro sistema operativo, pero más barato o localizable por Internet, la amenaza será mucho menor”. “La calidad de Windows 7 es la mejor defensa que tenemos”, sentenciaba este directivo.
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