También conocido como el Árbol del café, de él se han obtenido una diversa variedad derivada de esta mediante procesos transgénicos, pertenecientes en Asia y África. Descubierta en un monasterio por un monje cristiano al observar que las cabras de su granja siempre se encontraban con muchas energías corriendo de un lado a otro. Llegó el día en que al revisar las causas, descubrió una rara planta en forma de arbusto con granos negros. Recordó como tomaban constantemente «Té» y lo intentó hacer de la misma manera para ver sus resultados, obteniendo por esto, un sabor demasiado amargo y poco placentero. Frustrado, el monje arrojó estos desagradables granos a la hoguera, en donde al observar como se tostaba decidió hacer el mismo proceso anterior, pero con los granos tostados, denotando que gracias a esto su amargura disminuyó.
Para el paso de los años se empezó a comercializar hasta llegar a ser exportado a distintos sitios como los de Asia y África, así hasta llegar al «Nuevo Mundo» – América; En donde, al descubrir su riqueza de nutrientes (En Sur América principalmente) sembrar los granos para crear nuevos cultivos era muy factible.
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