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Ser culto significa ser educado, saber sobre una variedad de temas, ser refinado y sofisticado.
También ser curioso, sin prejuicios y de mente abierta. Ser tolerante y respetuoso con las personas que son diferentes a nosotros. Vivir una vida de excelencia y discernimiento.
Veamos algunas formas de adquirir más cultura.

Frases célebres

Las frases célebres son una forma fácil y amena de ampliar conocimiento. Son pildoras concentradas de conocimiento en las que se resumen la visión de las personas más brillantes de todos los tiempos.

Apreciar el arte

Las personas cultas saben apreciar el arte. Para poder apreciar plenamente las pinturas, esculturas, grabados, etc. de los maestros, es necesario tener ciertas habilidades y conocimientos técnicos.
Para ser culto, debes aprender a ver el arte a través de las lentes de la línea, la luz, la perspectiva, la composición y otros elementos cruciales del oficio.
Para avanzar en este campo puedes optar por hacer un curso, leer libros de la materia y como no, ver las obras de una manera más analítica.

Aprender los mejores cuadros del mundo

Una persona culta debería ser capaz de reconocer, identificar al artista y saber un poco sobre cada uno de los mejores cuadros del mundo.
Hoy en día es facilísimo consultar este tipo de información por internet. Memorizar 50 obras marca una gran diferencia.

Ir a museos y galerías de arte

Visita todos los museos y galerías de arte importantes de tu ciudad. Si puedes, amplía la lista a los principales museos de tu país. Por supuesto, si puedes viajar a los mejores museos del mundo -incluyendo El Prado, el Louvre, el Museo Metropolitano de Arte, etc.- sería ideal.

Apreciar la arquitectura

Desde el Coliseo hasta el edificio Chrysler, deberías ser capaz de reconocer los edificios más grandes del mundo. Además, deberías saber quién los construyó, cuándo y la finalidad del edificio.

Lee los libros del canon de la literatura occidental

El canon de la literatura occidental es una lista de los libros que los estudiosos occidentales aceptan generalmente como los más importantes e influyentes en la formación de la cultura occidental. Es decir, los libros de autores occidentales que tienen mayor mérito artístico.

Puede encontrar muchas listas de libros incluidos en el canon en Internet.

Probar comidas de países diferentes

Una persona culta ha probado la comida de muchos países diferentes. Aunque lo ideal sería viajar a diferentes lugares para probar su comida, dependiendo de dónde vivas, eso no es imprescindible.

En las ciudades más cosmopolitas hay una gran diversidad de restaurantes. Explora la oferta culinaria de tu ciudad y visítalos poco a poco.

Escuchar música clásica

El género musical que más se asocia a la cultura es la música clásica. Empieza por escuchar y familiarizarte con las piezas de música clásica que todo el mundo debería conocer.

Conocer las óperas más importantes del mundo

La ópera y la cultura van de la mano. Ver y escuchar ópera puede ayudarnos a ver, oír y experimentar el mundo con mayor riqueza.
Puedes empezar con Le Nozze di Figaro (Las bodas de Fígaro) de Mozart.

Aunque siempre es mejor vivir la ópera en directo, verla en el televisor o en el ordenador portátil será suficiente hasta que tenga la oportunidad de asistir al espectáculo real.

Conocer los ballets más importantes del mundo

El ballet, al igual que la ópera, está en el centro de la cultura. Cuando se asiste a una representación de ballet, se escuchan algunas de las músicas más emblemáticas jamás escritas y se contemplan hermosas coreografías.

Puedes empezar con El lago de los cisnes, de Tchaikovsky. Al igual que la ópera, lo mejor es el espectáculo real, pero con verlo desde casa bastará.

Ir al teatro

La actuación en directo es una forma de arte importante que se remonta a los antiguos griegos. Lo ideal sería viajar a Nueva York para ver una obra de Broadway, o al Shakespeare’s Globe de Londres para ver una de las obras de Shakespeare.

Sin embargo, puedes iniciarte en tu propia ciudad asistiendo a las obras de teatro que ponga en marcha tu compañía de teatro local o los grupos teatrales itinerantes.

Ver películas extranjeras

Las películas extranjeras te permiten conocer la vida de lugares que quizá nunca visites. Te permite comprender mejor las tradiciones y los puntos de vista extranjeros.

Aprender los modales y la etiqueta adecuados

Una forma de asegurarse de que se trata a los demás con respeto es aprender los modales y la etiqueta adecuados. Al fin y al cabo, los buenos modales hacen que las cosas en la vida sean más fáciles y agradables para todos. Además, la persona más elegante de la sala no es la que va mejor vestida, sino la que tiene los mejores modales.

Estar al día de la actualidad

Una persona culta está al tanto de lo que ocurre en el mundo, tanto económica como políticamente. En el caso de las historias importantes, asegúrese de conocer no sólo el quién, el dónde, el cómo y el cuándo, sino también el por qué. Además, propón tus propias ideas sobre lo que debería hacerse con la situación.

Viajar

Parte de ser culto es estar familiarizado con diferentes partes del mundo, y la mejor manera de conseguirlo es viajando.

Además, como dijo una vez Mark Twain, «viajar es fatal para los prejuicios, el fanatismo y la estrechez de miras». Cuanto más te relacionas con personas de otras culturas a través de los viajes, más te das cuenta de que -en los aspectos que realmente importan- todos somos bastante parecidos.

Aprender un nuevo idioma

Hay muchas maneras en las que aprender otro idioma te ayudará a ser más culto. He aquí tres de ellas:

En primer lugar, podrás entender referencias y matices culturales.
En segundo lugar, te ayuda a captar diferentes formas de pensar y perspectivas vitales.
Y tercero, te permite salpicar tu conversación con palabras y frases extranjeras. Esto último es terriblemente pretencioso, pero de qué sirve ser culto si no puedes presumir de vez en cuando.