Siempre escuchamos algún tipo de estadística, donde se señala que los matrimonios, de una u otra forma, terminan mal. Con la pareja totalmente confundida, y los niños, si los tienen, totalmente devastados y perdidos. Aquí te vamos a mostrar una serie de consejos muy sencillos, para que por lo menos intentes que tu matrimonio no se vea sumergido en el fracaso.
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Promover un hogar independiente
Las finanzas suelen ser un problema recurrente, y el motivo de muchas separaciones. Debes saber que las mismas deben formar parte de una misma pieza. Ambos en la pareja deben decidir juntos sobre este particular, de una manera sensata, consensuada, y sin conflictos. Debes saber que las mejores decisiones son las que se toman con la cabeza en frio, y no sobre impulsos.
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Después de haberse casado, se debería continuar con el noviazgo
Deben intentar mantener aquellas cortesías y complicidades que tenían cuando eran novios. Los matrimonios exitosos, no son producto de algo casual, sino que son producto de algo trabajado. La monotonía definitivamente destruye el matrimonio, así que deben ver la manera de romper con esa monotonía, y preguntarse, qué es lo que hacían cuando eran novios para sorprenderse el uno a otro constantemente? . El amor y la felicidad no es algo individual, debe ser algo compartido, y el sacrificio en beneficio de tu pareja, dirá mucho a tu favor, y a favor de la relación.
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Hay que cuidar los malos pensamientos
Rodearse de malos pensamientos, hacen que el matrimonio se destruya poco a poco. Hay veces que quizás se piense que el matrimonio fue un error, que no pueden soportarse muchas cosas del uno y del otro, que regresarás a vivir con tus padres. En definitiva todos estos pensamientos, son un retroceso para la relación. Siempre deben pensar en temas productivos, y rodearse de pensamientos que aporten soluciones positivas a la relación. Somos seres que hemos aprendido a vivir en sociedad, que hemos sido educados para seguir unas pautas sociales. Y en las relaciones, también se puede aprender a mantener una relación cordial y amorosa.
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Nunca duerman de mal humor
Permanecer con riñas a lo largo del día, no es saludable. Y menos lo es, irse a dormir pensando en aquella disputa, o aquel enojo. Aunque sean problemas muy pequeños hay que ir resolviéndolos, ya que nuestro subconsciente los va guardando para posteriormente darle una solución, positiva o negativa. No hay que llegar a interiorizar estos problemas, para luego mostrarse agresivos, o hirientes. Nadie es perfecto, y es importante saber perdonar, y lograr irte a dormir cada día con la conciencia tranquila, proporcionará un beneficio incalculable para la relación, y par tu vida cotidiana.