¡Adiós, Madrid, que te quedas sin gente!

¡Adiós, Madrid, que te quedas sin gente!: Se dice, irónicamente, para referirse quien presume de ser el más importante, el único imprescindible. ¿Pero qué se cree, que sin estar él no sabemos hacer nada? ¡Adiós, Madrid, que te quedas sin gente! Se cuenta el chascarrillo del rústico que, tras haber trabajado en Madrid durante muchos años, decide regresar a su pueblo. Cuando el tren parte de la estación echa un último vistazo a la ciudad y pronuncia tan lapidaria frase.

Deja un comentario

Tu email nunca se publicará.


Ir a la barra de herramientas