A cada cerdo le llega su San Martín: Con esta sentenciosa expresión se da a entender que a cada uno le llegará su hora, en el sentido de que si alguien ha actuado de forma incorrecta, tarde o temprano pagará su culpa; o sea, seguirá el mismo camino que el cerdo, destinado, aunque no tenga culpa, sino más bien todo lo contrario, al fin de todos conocido: la matanza, que comienza a realizarse por San Martín, cuya festividad se celebra el 11 de noviembre. No merece la pena que contestes a sus ofensas; déjalo: a cada cerdo le llega su San Martín. V. Con la ayuda del vecino mató mi padre un cochino||Estar de buen año.