Acabar/terminar como el rosario de la aurora

Acabar/terminar como el rosario de la aurora: Finalizar una reunión de forma desordenada, tumultuosa o violenta. La representación fue un desastre: abucheos, silbidos, pataleos, hubo incluso actores que se encararon con el público… Allí volaron tomates, huevos… Vamos, que aquello acabó como el rosario de la aurora y tuvo que intervenir la policía para apaciguar los ánimos. El Rosario de la Aurora es una antigua tradición que consiste en reunirse en las primeras horas del día para rezar el rosario. El dicho se dice que se originó por un incidente que tuvo lugar en Madrid a mediados del siglo XIX entre dos cofradías que sacaban a sus vírgenes en procesión, la de la Aurora y la del Henar. Al parecer, coincidieron en una calle estrecha y la discusión sobre quién debía pasar acabó a farolazos. En realidad, puede pensarse en cualquier enfrentamiento entre fie- les que acudieran a rezar el rosario y algún grupo de alborotadores nocturnos. (v. Adelante con los faroles). En Andalucía se dice Acabar como el rosario de Espera, por lo que es posible que la riña que originó la frase tuviera lugar en este pueblo gaditano. V. Armarse un cirio.

Deja un comentario

Tu email nunca se publicará.


Ir a la barra de herramientas