El marketing siempre ha tenido la premisa de que, entre más presente esté una marca en la mente de los usuarios, mejor posicionada estará respecto a otras marcas competidoras. Sin embargo, los tiempos han cambiado mucho desde aquellos días en que las personas consumían pasivamente comerciales en los intermedios de la programación de TV, hoy son menos receptivos a la publicidad, sin mencionar que muchas personas bloquean directamente todo tipo de publicidad en la red. Con lo anterior se entiende que, saturar a los usuarios de publicidad no es la estrategia de marketing más inteligente hoy en día y, si bien las campañas de publicidad tradicionales aún tienen su utilidad, en un mercado tan competitivo y saturado como el actual se requiere de algo más relevante para posicionar una marca a largo plazo, por ello, en este artículo te hablaremos sobre qué es el marketing de contenidos y de qué manera funciona.
El marketing de contenidos tiene como premisa la creación de contenido cuya información sea util y/o interesante para los usuarios que son clientes potenciales. Por más contradictorio que pueda parecer, los contenidos de este tipo de estrategia no son publicitarios, sin embargo, en el largo plazo es una de las formas más eficientes de fidelizar personas hacia una marca en concreto.
Algunos ejemplos de marketing de contenidos son:
Blog Maybelline: es un portal en el que se puede acceder a tutoriales y consejos de maquillaje.
Videos de GoPro: mediante diferentes redes sociales la marca GoPro ha promovido la tendencia de subir videos grabados con sus cámaras, esto especialmente mientras se realizan deportes extremos, como paracaidismo, barranquismo, parkour y otros deportes cuyos videos grabados desde la perspectiva del deportista obtienen una gran cantidad de tráfico.
Podcast de Netflix: Nada que ver (Latinoamérica) y ¿Sigues ahí? (España) son dos podcasts creados por Netflix en los cuales los conductores hablan de distintos temas como técnicas de actuación, música, he incluso tocan tópicos como gastronomía, cultura urbana y más.
Aunque presente en algún logo o referenciado sutilmente, los anteriores ejemplos son prácticamente ausentes de la promoción de la marca, con lo cual, a diferencia de un anuncio publicitario que busca captar la atención del usuario, en el caso del marketing de contenidos es el usuario quien activamente busca y consume estos contenidos, con ello, este tipo de estrategia permite crear una audiencia sólida que empatiza con los contenidos y con ello, también con la marca que los crea, promoviendo con ello el prestigio y sobre todo, la fidelización hacia la marca de una manera natural.
El marketing de contenidos es así una forma ideal de mejorar la manera en que una marca es percibida por los usuarios, esto gracias a los contenidos que, al estar desprovistos de material publicitario, crean una conexión más fuerte del usuario con la marca, lo que a su vez deriva en mayor confianza y prestigio hacia la misma y, como consecuencia de este proceso, se mejora las ventas.