Desde ya casi 570 día que estas en mi ser a cada segundo de mi existencia, viviendo en mi, conmigo; todos aquellos momentos y lugares que conociste, que conociste conmigo o que simplemente volviste a visitar, pero ahora los vistes a través de mis ojos. Tratando de sentir la admiración que se siente al ver algo por primera vez, y si tal vez para ti ya no era la primera vez, pero que felicidad veía en tus ojos; la felicidad de ver junto a quien amas algo por primera vez, el poder de descubrir algo ya conocido por segunda vez, pero ahora no siendo tan egoísta, sino compartiendo con el ser amado el conocimiento que trae consigo la experiencia. Aquella experiencia que muchas veces trata de separarnos, pero que en realidad es la que más me enamora de ti.
Hace ya casi 13680 minutos que pactamos nuestro en encuentro en aquel lugar mágico bañado por las aguas del mar, en el cual la brisa corría y el sol brillaba con vehemencia para anunciarnos la felicidad del cielo con el encuentro de tan bellos seres que hace mucho ya se esperaban, se deseaban, se necesitaban e incluso se amaban antes de conocerse. ¿Acaso no lo sentiste?, ¿no sentiste aquello que sentí yo?… Eso de conocernos toda una vida, de poder decirnos todo sin miedo, cuando el otro simplemente asentía, porque al parecer todo lo llevaba, de alguna manera misteriosa, en el más profundo de sus recuerdos. Como si desde otras vidas estuviésemos destinados a estar juntos.
¿Sentiste lo que yo? Aquel miedo inexplicable que apareció sin avisar, aquel extraño sudor que emanaba de tu cuerpo, bajando tu mirada por timidez y tratando de lucir agradable y atrayente, incluso deseable. ¿Lo sentiste amor?… Yo se que si, es irrefutable. Todo aquello solamente fue la antesala para todo lo que vino después: viajes, encuentros, peleas, salidas, idas al cine, conflictos, regalos, temores, celos, certezas, desengaños, perdones, esperanza, dolor, alegría, felicidad, tristeza, emociones, lujuria, pasiones, cariños, mimos, lecturas, planes, besos, abrazos y sobre todo mucho amor. Es demasiado, no tengo todas las palabras para describir todas aquellas cosas que hemos vivido, y si las tuviera, no sería justo escribirlas todas, porque con toda una vida que tenemos para vivir juntos, aun faltan muchas por conocer y muchas otras por vivir, por eso, aquellas que faltan las guardo muy dentro de mi corazón, con el anhelo de que un día salgan y nos llenen de conocimientos, sentimientos y fuerza en el largo camino de estar juntos y hacernos compañía. Que aquello que un día nos lastimó y no nos gustaba del uno o del otro, haya quedado solamente en el recuerdo, como fieles hitos de aquello que significa amarnos, recordándonos que hemos tomado conciencia, que somos más sabios ahora y que conocemos aquellas ranuras por las cuales nuestro amor se puede partir, porque cual cristal puro es fuerte, pero debe ser pulido y protegido con uñas y dientes.
Hace ya 820800 segundos que hemos madurado con nuestras acciones, que hemos aprendido el uno del otro, que hemos soñado con nuestro futuro, que aunque sea increíble desde aquel lejano día en el tiempo, pero tan fresco en nuestra memoria, nos empezamos a amar y a planear lo que sería de nosotros. Ha pasado ya todo el tiempo descrito con anterioridad y lo que me resta por decir es que te amo, que sin ti mi vida no tiene sentido ya, que junto a ti he aprendido lo que significa la palabra AMOR. También he aprendido lo que involucra aquello, he comprendido lo que vivir junto a una persona significa. Logro entender ahora que en una pareja el “yo” deja de existir, para convertirse en un “nosotros”; comprendo lo duro que es acoplar una vida a la vida de otro ser, que el amar es mucho más que aquellos momentos lindos, que el amar es un todo que se construye día a día, que no se lo conquista una sola, que hay que regarlo con acciones o sino se marchita, que el amor, cual flor en primavera, en el otoño de las relaciones puede secarse y morir. Que sabemos la fecha en la que empezamos a amarnos, pero no se sabe con certeza si tendrá fin, porque así como los versos de nuestra canción rezan, nos amaremos a golpe de recuerdos, nos amaremos aunque uno de los dos ya no esté presente, nos amaremos porque por nuestro libre albedrio que nos da el hecho de ser un ser humano lo hemos decidido, por eso y por mucho más nos amaremos…
Ayer, hoy, mañana y siempre en mí vivirá la llana eterna de mi amor por ti. FELIZ DÍA AMOR. Hagamos de cada día una aventura, de los problemas un desafío y de cada lágrima una fiesta. Hagamos que estar juntos sea lo más placentero del mundo, en otras palabras y sin más que decir, HAGAMOS QUE EL AMOR ESTÉ CELOSO DE NOSOTROS DOS.
