IndyCar Series FORMULA 1
Sebastian Vettel al convertirse en el campeón mundial más joven en 2010, Sebastian Vettel se ganó un lugar seguro entre los tres o cuatro primeros pilotos de la Fórmula 1. Surgido del programa de jóvenes pilotos de Red Bull, Vettel es todo lo que la F-1 espera de un campeón mundial: hábil, con una mente ágil y, por sobre todo, muy pero muy rápido.
En reemplazo de Robert Kubica, que estaba lesionado, se clasificó con solidez en el séptimo lugar y terminó la carrera en el octavo, con lo que obtuvo un punto. Este desempeño incentivó a Red Bull a volver a traerlo bajo su ala y Vettel se convirtió en piloto de Toro Rosso de tiempo completo en el Gran Premio de Hungría. Luego de cometer algunos errores de novato, terminó en un bien ganado cuarto puesto en el húmedo Gran Premio de China.
Fortalezas y debilidades
Es uno de los pilotos más rápidos de la grilla y es un experto a la hora de liderar desde la pole position. Sin embargo, cuando partió de algunos puestos más atrás o lo superaron en la primera curva, su ímpetu le costó varios accidentes que se podrían haber evitado.
El comienzo de 2008 se presentó difícil para el piloto de la escudería Toro Rosso debido a una serie de accidentes, pero se aseguró un quinto lugar muy sólido al final de la carrera de Mónaco. Habiendo ganado confianza, obtuvo su primera pole position y victoria en un Gran Premio de Italia castigado por lluvia con un desempeño extraordinario al volante de una máquina que se creía destinada a la mitad de la grilla. Luego de culminar el campeonato en el octavo lugar, se pasó a Red Bull Racing y de inmediato comenzó a pelear por el campeonato al lograr victorias en Shanghai, Silverstone y Suzuka.
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