En las semanas siguientes a los terribles acontecimientos del 11 de septiembre de 2001, muchas personas afirmaron haber tenido premoniciones de los ataques días o incluso semanas antes del fatídico suceso.

Existen miles de ejemplo de premoniciones que resultaron ser ciertas, el problema de la gran mayoría de las supuestas premoniciones es que no están documentadas. Cualquiera puede decir que ha tenido una premonición sobre el accidente de un tren, el resultado del mundial de futbol o algún otro evento después del hecho. Lo que las hace dignas de consideración seria es la prueba de que efectivamente la premonición tuvo lugar mucho antes del evento.

 

Premoniciones de experiencias comunes y no comunes

Las premoniciones son sensaciones o sueños premonitorios de que algo va a suceder que está prediciendo el futuro. La mayoría de las personas han experimentado premoniciones en un grado u otro. El teléfono suena y «sabes» quien te esta llamando, aunque la llamada haya sido inesperada. A veces la premonición no es tan específica. Quizás puedas sentir un gran e inexplicable sentimiento de tristeza que te ha estado molestando todo el día. Sólo más tarde te enteras de que un pariente cercano ha muerto.

Hay muchos casos de este tipo que experimentamos de vez en cuando, y a veces (los escépticos dirían siempre) se pueden atribuir a una mera coincidencia.

Sin embargo, hay veces en que una premonición es tan fuerte que quien la experimenta tiene pocas dudas de que va a suceder. Estas poderosas premoniciones son mucho más raras, pero ocurren con suficiente frecuencia como para que algunos investigadores paranormales crean que son reales. Algunas personas parecen ser más sensibles a este tipo de sentimientos y pueden ser llamadas «sensibles» o «psíquicas».

Estos sentimientos son más poderosos entre los parientes cercanos, donde el vínculo psíquico parece ser más fuerte. Y si esta charla sobre «vínculos psíquicos» te molesta porque suena a jerigonza de la Nueva Era, considera que incluso algunos científicos convencionales -físicos cuánticos y psiquiatras por igual- entienden cada vez más que toda la conciencia humana está conectada.

Las premoniciones pueden ser tan sutiles como una sensación de escalofrió o pueden ser tan abrumadoras que te sacan de tu rutina diaria y te impiden pensar nada más. Pueden ser vagas, nada más que un sentimiento, o pueden ser tan vívidas que algunos experimentadores dicen que es como ver una película. Las premoniciones pueden predecir algo que sucede un minuto más tarde… o semanas o incluso muchos meses más tarde. Pueden venir mientras lavas los platos o pueden venir en sueños. Incluso, pueden verse en el mundo onírico, mediante los famosos sueños premonitorios.

 

 

Has tenido una premonición, ¿y ahora qué?

Si eres propenso a las premoniciones que muy a menudo se hacen realidad, o has tenido una fuerte premonición sobre algún evento futuro, debes documentarlo. Una premonición indocumentada es prácticamente inútil y no será creída.

Probablemente no querrás documentar cada pequeña premonición que tengas. De hecho, puede que no sea posible documentar algunas de ellas: por ejemplo, esa llamada telefónica que llega justo dos minutos después de tu premonición.

Imagina este ejemplo de documentación de una premonición. Aunque hace tiempo que no hablas con ella, has tenido una premonición o un sueño vívido de que tu hermana está a punto de experimentar un gran cambio en su vida: de algún modo, sabes que está embarazada. Éste es sólo un ejemplo, por supuesto; la premonición podría ser de cualquier cosa: un accidente de avión, un accidente con un pariente o un desastre natural.

 

Entonces, ¿Cómo documentar su premonición?

Hay varias maneras:

Llevar un diario: Consigue un diario y escribe cualquier premonición que tengas. Asegúrate de anotar la hora y la fecha en que la experimentaste. El punto débil de este método, en lo que respecta a la verificación por parte de otros, es que tales diarios pueden ser alterados y falsificados, anotando una anotación previa para un evento que ya ha sucedido. El valor de un diario, asumiendo que se es honesto, es que se tiene un registro personal de las premoniciones, cuya tasa de éxito se puede rastrear.

Cuéntaselo a los demás. No mantengas tus premoniciones en secreto. No querrás convertirte en un aburrimiento molesto arengando a tus amigos con cada pequeña premonición que tengas, pero si crees que puede ser algo importante, díselo a alguien en quien confíes.

Utilice un lugar con sello de fecha. La mejor manera de documentar su premonición es en un lugar con sello de fecha que no esté bajo tu control. Puedes utilizar el Proyecto Premoniciones o una base de datos similar para introducir su premonición.

 

Tienes que ser específico en tus premoniciones

Independientemente de los métodos que utilices, se minucioso en la descripción, incluyendo tantos detalles como puedas recordar. A veces es difícil describir los sentimientos, pero, pero hazlo lo mejor que puedas. Describe lugares, personas, nombres, puntos de referencia, formas, el significado de los colores, olores, temperaturas y emociones que hayas sentido. Evita rellenar tus descripciones con cosas que no hayas sentido realmente. Debes ser tan preciso y honesto como sea posible.

 

Si crees que tu premonición se ha cumplido, sé tan honesto como sea posible. Puede que no sea cien por cien exacta, pero debe haber suficientes detalles correctos para verificarla. Aquí es donde entra en juego tu informe detallado. Si sólo dices: «Percibo un choque de trenes en algún lugar del este de los EE.UU.…» tu credibilidad disminuye porque, desafortunadamente, prácticamente cada semana hay un choque de trenes en algún lugar del este de los EE.UU. Cuanto más probable sea que ocurra un evento, menos se tomará en serio tu vaga premonición.

 

No dejes pasar tus premoniciones. Cuantas más pruebas verificables tengamos de este fenómeno, más cerca estaremos de comprenderlo.

 

Fuentes:

Libro: Premoniciones de Emili Bayo

Blog online: http://sueñospremonitorios.com