«Avikiviks, maylohihi …»: quién habría pensado que estas palabras sin pretensiones e incluso un poco divertidas en la canción de la película de Disney «Lilo y Stitch» serían el punto de partida en mi viaje al mundo de las danzas hawaianas». Esta afirmación la hizo una amiga mía hace unos años. Hoy es coreógrafa, profesora y bailarina de este tipo de danzas. El archipiélago hawaiano se ha convertido desde entonces en un objetivo vital para ella. Estas carismáticas islas, que son en realidad volcanes, ejercen sobre quienes se instruyen en esta danza un peculiar poder de atracción, y de hecho, el hula, la danza hawaiana, conserva a día de hoy esa relación con el volcán y el mar, la naturaleza originaria de unas islas únicas en el mundo.
VISITAR HAWAI SIN SALIR DE TU CIUDAD
Cuando llueve a cántaros por la ventana y cae el azul del otoño, nos transportamos mentalmente a países cálidos: la playa, la arena cálida, el sonido de las olas … ¡Hawai! Sí, el ambiente paradisíaco en las islas siempre está asociado con la relajación, la serenidad y el baile en la playa. Ese pequeño paraíso existe en numerosos estudios de danza de muchas ciudades. Si durante mucho tiempo has estado pensando qué hacer en tu tiempo libre o cómo superar la tristeza del otoño, en un estudio de danza hawaiana hallarás la respuesta que estabas buscando.
Sumérgete en el mundo de las danzas hawaianas, puedes aprender muchas cosas nuevas e interesantes sobre las tradiciones y la cultura de los hawaianos, y el estudio de la danza en sí comienza con el análisis de las letras en el idioma hawaiano. La danza Hula es principalmente una historia contada de la tradición oral sobre amor, amistad, relaciones familiares, largas caminatas a la cascada, surfear en la puesta de sol, los volcanes, relajarse en la playa, cosechar cocos y, a veces, incluso sobre la guerra entre los líderes hawaianos.
Bailando en el estudio, con los sonidos del ukelele y los ritmos del tambor hawaiano, hecho de calabazas o palos de bambú, puedes caminar bajo la lluvia, disfrutar del aroma de las flores tropicales y el canto de las aves del paraíso. A primera vista, los movimientos en el baile hawaiano pueden parecer bastante fáciles, pero sólo hasta que intentes bailar desde las rodillas durante una hora.
ELEGIR UN BUEN ESTUDIO
Un buen estudio de danza Hula estudia dos estilos principales de danza hula: moderno (auana) y antiguo (kahiko). Es de destacar que en la antigüedad, solo los hombres realizaban la danza hula. Era una especie de preparación física para la guerra: no sólo bailaban, sino que también para entrenar la memoria tenían que enumerar los nombres de sus familiares con al menos 10 generaciones, arrastrar enormes piedras en sus manos hasta el agua y treparse a una palmera. Toda esta historia debería conocerla tu profesora o profesor de Hula.
El estilo moderno de la danza hawaiana apareció mucho más tarde, cuando los primeros inmigrantes trajeron a las islas instrumentos musicales no tradicionales hawaianos, por ejemplo, guitarra ukelele, guitarra floja y otros. Fue esta nueva música la que inspiró a los maestros hawaianos a crear un estilo moderno de hula dance suave, apacible, femenino y romántico.
ORÍGENES DEL HULA
Las leyendas dicen que la danza hawaiana apareció mientras la diosa de los volcanes, Pelé navegaba hacia las islas y vio a una niña en la playa que bailaba en la arena, y algunos dicen que, de hecho, la danza apareció durante la «lucha de baile» de dos mujeres por el amor de un hombre. Hoy ya no es posible descubrir si estas leyendas son exactamente ciertas, dado que los hawaianos son grandes maestros de los juegos de palabras y el cifrado de información en las letras de las canciones.
La danza hawaiana tiene una importante tarea cultural: con la ayuda de canciones y bailes, los hawaianos transmitieron sus historias sobre la vida en las islas, leyendas y mitos de generación en generación, especialmente en aquellos momentos en que tenían prohibido practicar hula y hablar hawaiano. «Me alegra que estamos coreografiando algunas de las danzas del estilo antiguo, que tiene casi 100 años, y no podríamos hacer esto si no fuera por el gran deseo de los hawaianos de preservar su rica cultura». Me comenta mi amiga.
BENEFICIOS DE APRENDER HULA
En el proceso de aprender hula, no sólo se desarrolla tu cuerpo, sino también tu mente. Con cada nuevo baile, los estudiantes descubren nuevas cualidades en sí mismos: se vuelven más abiertos y liberados, se relajan y al mismo tiempo se centran en el momento, ¡estar aquí y ahora! Los bailes hawaianos desarrollan perfectamente la imaginación: el bailarín debe poder elegir el color de tela adecuado para la falda para un baile particular y tejer lei (guirnaldas) de diferentes materiales (flores, semillas, hierbas, paja) que estarán en armonía con el traje de baile.
¡El baile hawaiano es muy positivo y alegre! «Me alegro cuando al final de la lección veo sonrisas en los rostros de los estudiantes», me cuenta siempre mi amiga, «el baile de hula ayuda a mirar de manera diferente al mundo exterior y el 100% tiene un gran efecto curativo». Una peculiaridad de los bailes hawaianos es la expresión de sentimientos y emociones a través de movimientos, lo que ayuda a aliviar la tensión nerviosa y, como dicen los hawaianos, ayuda a «encender tu fuego interior, el volcán que tenemos dentro». No importa dónde realices el baile de hula: en la sala frente al espejo, en el gran escenario, en el parque o en las orillas del río o del mar, sin duda sentirás armonía con tu cuerpo, disfrutando de la melodía de la canción hawaiana.
LA BELLEZA DE COMPARTIR
Este es un tipo de poesía en movimiento que se puede compartir con otras personas en cualquier momento. Muchos hawaianos afirman que si se les pide que cuenten una historia de su vida, en lugar de cien palabras, lo más probable es que la bailen. «En el aula, a menudo digo:» ¡Baila, si quieres decir algo, y luego dilo!» Es sorprendente que las canciones y bailes hawaianos transmitan tan profundamente el significado de lo que está sucediendo, dado que en el alfabeto hawaiano solo hay 12 letras. “La simplicidad del idioma hawaiano es engañosa. Los hawaianos tienen entre 50 y 80 palabras para un fenómeno como lluvia o viento, y son grandes maestros para convertir una palabra corta en una larga, repitiéndola, lo que cambia completamente su significado. Por ejemplo, el pez nacional hawaiano se llama Humuhumunukunukuapuaa».
Las danzas hawaianas son la capacidad de convertir cualquier momento de la vida en una aventura, con el placer de recordarlo después de 20 años. Los hawaianos saludan a todos con la palabra «Aloha», cuyo significado va más allá del simple «¡Hola!» y que no se puede explicar completamente. Aloha es más bien un estilo de vida: amar, disfrutar, no pensar en el futuro lejano (después de todo, los hawaianos viven al lado de volcanes activos), disfrutar todos los días, respetarse mutuamente y ayudar desinteresadamente a las personas que necesitan ayuda. Los hawaianos nunca se despiden, pero siempre dicen «A hui kana» – ¡Nos vemos! – o literalmente, «¡Hasta que tú y yo nos volvamos a ver!»