El World Travel Market, las mujeres y las reinas
Esta semana fui al World Travel Market que se realiza todos los años en Londres. Fui especialmetne a ver la presentación sobre el Global Report on Women in Tourism elaborado por la Organización Mundial de Turismo (OMT) en el 2010.
Entre los conferencistas estaba la Ministra de Turismo de Paraguay, Liz Cramer, quien muy abiertamente lamentaba que en su país la percepción del rol de las mujeres en turismo ha sido tradicionalmente vinculada a los Reinados de Belleza. Como escribí antes, lo mismo aplica para Ecuador y probablemente para otros países en desarrollo. Por otro lado, ella misma es la prueba viviente de que esa percepción está cambiando. El documento de la OMT encontró que el 20% de los ministros de turismo alrededor del mundo son mujeres y es mucho más probable que una mujer lidere turismo antes que cualquier otra cartera de Estado. Sin embargo, las (pocas) mujeres en posiciones de liderazgo siguen ganando de 10 a 15% menos que sus colegas hombres.
Aún cuando hay más mujeres que hombres empleadas en el sector turístico en el mundo, el tipo de trabajo que realizan está marcado por estereotipos de género. En otras palabras, por machismo, o por sexismo. En las líneas aéreas por ejemplo, las áreas de venta, counter y auxiliares de vuelo están dominadas largamente por mujeres. Mientras, el 95% de los pilotos de aerolíneas comerciales son hombres. Aún más alarmantes son las cifras y los casos de explotación, tráfico de mujeres y acoso sexual directamente relacionados al sector turístico. Algo que ha sido tradicionalmente tolerado (y fomentado) por la industria, según este interesantísimo reportaje de The Guardian.
El Secretario General de la OMT, Taleb Rifai, enfatizó en su intervención que el problema no es solamente una cuestión de ética y de género, sino de derechos humanos: en su intervención comparó el necesario despertar de las mujeres en el turismo con las revoluciones que se dieron en la primavera árabe y que se siguen dando en el mundo a través de diversos movimientos sociales. Según Rifai, los retos de la OMT están orientados a hacer conciencia del papel igualitario de las mujeres en el empleo, así como a promover las microempresas turísticas y las cooperativas de mujeres organizadas. Luego, un par de mujeres de países en desarrollo hablaron de sus dificultades para acceder a préstamos y obtener permisos para sus negocios turísticos. «El problema son los estereotipos – decía Zainab Ansel, una emprendedora de Tanzania – la gente no creía en mi negocio porque soy mujer. La gente no creía que yo podía llevar a mis turistas a escalar el Kilimanjaro». Al final la sala que estaba repleta estalló en aplausos.
Justo después de la charla, fui a visitar el stand de Ecuador. La Miss Ecuador en Reino Unido era la anfitriona de nuestro stand (que por cierto estaba prácticamente sola). Nuestra reina de belleza recibía a los visitantes vestida de garota y alegremente posaba para tomarse fotos con los hombres que le pidieran. No sé qué opinen ustedes, pero a mi, francamente, me dio vergüenza.
¿Garota? ¿Ecuador?….. Como que un poquito de falta de identidad,creo.
Es lamentable que se desperdicien este tipo de oportunidades, en las que pienso, se puede contribuir con un granito de arena para el desarrollo turístico de nuestro ECUADOR.
Carlita, Ministra de Turismo!!! Si la Pachamama es la madre tierra y lo más pristino son las áreas protegidas por que no somos nosotras las que impulsamos el turismo de naturaleza?