Vanessa's blog

La etapa de adolescencia y pre adolescencia, es una edad difícil para nosotros los seres humanos, es cuando viene el tiempo de los cambios, sentimos que lo sabemos todo, aunque en el fondo sabemos que no, insistimos en tener la razón y luchamos contra los que se oponen en nuestras ideas e ideales.

Vemos algunas cosas sin mucha importancia, cuando cometemos errores creemos que un simple lo siento, resuelve un grave problema. Queremos que todos nos soporten, pero no estamos dispuestos a soportar a nadie, especialmente si no comparte nuestras ideas o ideales.

Ahora uno de los deseos de Dios es que nadie tome en poco la etapa de la juventud, como también se demanda obediencia para que los días se alarguen sobre la tierra.

 Pero cuando nos relacionamos tenemos problemas para cumplir con Dios, en alusión  a estos versículos. Para comprendernos con los jóvenes, especialmente entre padres e hijos, es bastante difícil por ello Pablo exhorta a no provocar a ira a nuestros hijos, como a los hijos a obedecerá sus padres…. Esto no habla sino de la importancia de tener buena relación, entre padres con hijos.

Como joven e hijo se  debe de entender que el padre desea lo mejor para uno, prueba de ello es que Dios quien conoce el corazón del hombre, le dice a los padres si vosotros siendo malos saben dar buenas dadivas a vuestros hijos…. Esto enseña a que un hijo no debe pensar mal de un padre, imaginando que no lo quieren, solo por no permitirle hacer x cuestión, pues un padre buscara siempre y deseara lo mejor para con su hijo.

La relación de un hijo con su padre es lo mejor que pueda ocurrir, un padre no puede ser suplantado por el amor de otros, en todo caso solo por Dios, pues nadie te amara de verdad sino tu padre. El mundo de los jóvenes está lleno de fantasías e inmadurez, es  un polo opuesto que cuando uno es adulto, ya para entonces buscamos vivir por realidades y hemos recogido en la vida la muy conocida preciosa experiencia. Alguien conto del pescadito predicador, quien predicaba el mensaje del sartén con aceite, en cierta ocasión este pescadito fue engañado por una carnada en un anzuelo, llego a la superficie, el observaba que a otros peces, los metían al sartén con aceite. El contaba en su testimonio su experiencia de aquello desconocido para el hasta ese entonces, y añadía como de una forma milagrosa se escapo de las manos del que lo atrapo y les decía tengan cuidado, para que no les pase lo que a mi. Los otros peces le gritaban mentiroso, lo que tú quieres es comerte toda la comida para ti. 

La falta de experiencia a veces nos deja en la posición de incrédulos y  pre juiciosos, entonces el joven ve la advertencia como una señal de competencia.

Esta gran diferencia de la experiencia y la inmadurez, nos marca con una equivocada mala interpretación de enemistad, el joven dice yo quiero hacer esto, el padre por vivir no de sueños sino de realidad y por su experiencia dice eso no te conviene etc.

 Este pequeño enfrentamiento provoca disgusto en ambas partes, produciendo malas relaciones.