Lo hecho en Argentina por la selección ecuatoriana de fútbol, es lo que se advertía desde la contratación de Reinaldo Rueda, como director técnico del equipo tricolor, hace casi un año. La mayoría de la prensa deportiva estaba en total desacuerdo con la vinculación del colombiano a las filas de la “tri”, nos parecía una involución, propias de otras épocas. Sin embargo la F.E.F. (Federación Ecuatoriana de Fútbol) encabezada por el presidente Luis Chiriboga Acosta, mantuvo su posición y desprecio todos los comentarios.
Ahora cuando nos enfrentamos a nuestro primer fracaso “oficial”, todos se rasgan las vestiduras y tiran la pelotita de culpabilidad.

1er culpable, la dirigencia:

Es imposible que un país como Ecuador que venía consiguiendo logros futbolísticos muy importantes a nivel internacional, contrate al D.T. penúltimo del mundial pasado.

Inicio desde este punto, para criticar esta última gestión de la dirigencia ecuatoriana, que me parece, que por ahorrarse unos cuantos dólares, contrato un técnico infructuoso para nuestras aspiraciones.

En las décadas pasadas, cuando no éramos nadie, cualquier nos caía como anillo al dedo, porque total nada podía ser peor de lo hecho hasta entonces, pero ahora cuando hay un nombre, un prestigio y aspiraciones, no podemos caer en erróneas decisiones arcaicas. El puesto de Director Técnico de un país futbolizado como el nuestro, debe ocuparlo un hombre de vasta experiencia, estudiado, con ideas cimentadas, debido a que nuestros jugadores ya no son tampoco lo de los 70´,80´ y 90´, ahora Toño juega en Inglaterra, se codea con Rooney y lo dirige Fergusson; Felipao es héroe de su equipo en España, y Noboa es nada menos que capitán de su equipo en Rusia; son otros ambientes donde los nuestros se desarrollan, su evolución es notable, por eso no podemos poner a cualquiera para que los motive, corrija y aconseje, que es “básicamente” lo que un seleccionador tiene que hacer.

2do culpable, el D.T:

Por más que Rueda diga que en el contrato con la F.E.F. jamás se habla de resultados en la Copa América, sin duda debe de rendirnos cuenta de lo hecho (casi nada) en Argentina.

La selección no debe volver a jugar un partido sin un propósito claro, una idea táctica definida, o sin ambición, ese es el trabajo de él, en la Copa América se vio un equipo desordenado, lento con muchos problemas a la hora de crear y qué decir de la definición. Teniendo unas de las mejores plantillas de la historia, el técnico no pudo consolidarla como equipo, y eso es imperdonable.

Rueda no solo se equivoco ahora, sino desde que inicio, hizo unos partidos preparativos paupérrimos, convoco reiteradas ocasiones jugadores que nunca debieron estar en un seleccionado, se equivoco mucha veces en los cambios durante los cotejos, cuando dio la lista definitiva de los 23 que viajarían Argentina, se equivoco, y de inmediato rectifico lo que pudo, a cuenta de discutidas lesiones de jugadores. De esta manera no se puede creer en un proyecto, no se puede pensar en alcanzar nada, es por eso que debe rendir cuenta de lo mal hecho de su labor.

3er culpable, los jugadores:

Muchas ocasiones hablaron (F.E.F) de un recambio generacional, y se decía que había de donde sacar a los nuevos jugadores, pero a Argentina fueron los mismo de siempre, jugadores que ya no tienen deseo de triunfar, que ya les paso el tren, a los cuales ya no se les puede exigir más, por su edad.

En la cancha se jubilaron, los que muchas veces nos dieron alegrías esta vez no pudieron y también tienen la culpa de este fracaso, pero no podemos ser desconsiderados y olvidarnos de todo lo bueno que hicieron por nuestro balompié, solo pedirles que den un paso al costado para las nuevas generaciones.

Un párrafo aparte a Erazo y unos cuantos.

Fricson Erazo, es nuestro único consuelo, ya que fue un jugador que por su inexperiencia no se podía pedir mucho, sin embargo destaco y rindió más que muchos veteranos. Los dos nacionalizados también jugaron, ellos hicieron sus tareas.

De donde hay pocos para escoger que es la defensa, parecería que encontramos a los dos mejores, Araujo “el nacionalizado” y Erazo “la sorpresa”. Felipe Caicedo quien muchas veces fue criticado también tuvo un buen torneo se salvo de la critica por sus goles ante Brasil y una que otra jugada, pero debe mejorar su definición al igual que Benítez. Noboa tiene juventud y esas ganas de triunfar que lo hacen acreedor del beneficio de la duda, con mucho por recorrer hay que buscarle un buen técnico que lo serene y lo ajuste. Valencia se lesiono, está en deuda para mí, se esperaba mucho de él, lo veremos en las eliminatorias.

Lo que se viene es difícil, nos quedan todas las eliminatorias y si no se hacen los cambios correspondientes otra vez nos podemos quedar fuera del mundial, y en vez de haber ahorrado contratando técnicos baratos, habremos perdido muchas cosas importantes para nuestro país.

En estos últimos días se ha hablado de Alfio Basile, ex técnico campeón con Argentina, como posible nuevo entrenador, cosa que me parece más lógico a nuestra pretensiones, ahora veremos si la dirigencia sigue poniendo por delante los intereses económicos que los deportivos.