Levando anclas a la aventura

“¿Por qué casi todos los muchachos sanos y robustos, con alma sana y robusta, se vuelven locos un día u otro por ir al mar?

¿Por qué, en vuestra primera travesía como pasajeros, sentisteis también un estremecimiento místico cuando os dijeron que, en unión de vuestro barco, ya no estabais a la vista de tierra?

¿Por qué los antiguos persas consideraban sagrado el mar?

¿Por qué los griegos le dieron una divinidad aparte, un hermano del propio Júpiter?”

-Alemán Melville, Moby Dick

La navegación comenzó como una forma de explorar el mundo. Aunque los marineros de hoy continúan apoyando el espíritu valiente de los navegantes y exploradores de siglos pasados, la navegación ya no es un medio clave de transporte, comercio internacional o guerra. La gente ha hace tiempo que replegó las velas de la aventura y los amantes de la navegación ven en ella una forma de ocio o deporte, aunque no siempre exenta de riesgos. El mar debe respetarse como antaño, aunque hay que reconocer que las embarcaciones actuales están mucho mejor equipadas y son más resistentes a las inclemencias del tiempo. Además, en una buena tienda naútica se pueden obtener toda una serie de elementos que facilitan cualquier navegación de un modo que ya quisieran para sí los exploradores de los siglos XV y XVI. 

Muchos marineros modernos navegan porque les gusta el mar. La navegación se considera el 17º deporte de más rápido crecimiento en los Estados Unidos, y se estima que más de 4 millones de estadounidenses son navegantes recreativos, según The Boating Channel. En Europa, 18 millones de ciudadanos practican deportes náuticos. Y las estadísticas apuntan a un crecimiento sostenido en el tiempo. Es normal, todos hemos soñado alguna vez con levar anclas y zarpar hacia otros puertos.

Y si te inspiras en navegantes tan famosos como Amerigo Vespucci o Vasco De Gama, o simplemente te encanta la sensación del viento en tu cabello, navegar es un deporte para saciar tu lado más salvaje y aventurero. ¡Izad las velas!

A continuación, aprenderemos sobre algunos de los estilos de navegación más populares y también descubriremos algunas formas divertidas de encontrar (y mostrar) tus artes marineras.

Tipos De Navegación Recreativa

Hay algunos estilos comunes de navegación recreativa que pueden satisfacerte si buscas diversión y aventura en alta mar. También tenemos algunas ideas inusuales si estás buscando algo un poco diferente.

Si eres un marinero principiante, puedes comenzar con pequeños veleros, como botes, daysailers y pequeños kilobots. Por lo general, tienen menos de 25 pies de largo y son fáciles de maniobrar. Se pueden navegar de forma individual o con un miembro de la tripulación.

Muchos marineros comienzan con pequeños veleros, e incluso cuando se convierten en profesionales, continúan su aventura de esta manera. Los botes son divertidos y fáciles, los equipos de carreras universitarias y olímpicas los usan, y son excelentes para los marineros de fin de semana.

Sin embargo, algunos aventureros llevan sus pasatiempos de navegación a un nivel completamente nuevo y van de crucero. El crucero no es solo un pasatiempo; es un estilo de vida. Son aquellos que desean pasar su vida navegando alrededor del mundo. Los marineros que eligen vivir en sus barcos durante largos períodos de tiempo. Sus barcos van desde simples keleboys hasta grandes yates de varios cascos. Muchos barcos de crucero tienen muchas comodidades para el hogar debajo de la cubierta y pueden incluir camas, inodoros, utensilios de cocina e incluso sistemas de entretenimiento, dependiendo de su tamaño. Es importante tener en cuenta que el mantenimiento de estos barcos debe llevarse al día, no en todos los puertos en los que se vaya a amarrar encontrará todo lo necesario. En esos casos, siempre está bien tener a mano una buena tienda de complementos nauticos online de confianza.

Los barcos se pueden alquilar con patrones para aquellos que desean la emoción o la relajación de navegar sin el trabajo que conlleva, y los yates se pueden alquilar con tripulaciones. Los cruceros al atardecer y las vacaciones de navegación en el Caribe son dos formas comunes de aventuras de navegación alquiladas en familia. Los cruceros al atardecer son una experiencia de crucero sin prisas y generalmente son alquilados por pequeños grupos de amigos o parejas. 

Varios centros turísticos venden viajes de un día de navegación, así como paquetes de cruceros de varios días en una isla para los navegantes que quieran romper con la normalidad. (Piense en usar protector solar adicional).

Pero si está buscando una alternativa a la escena de sol, arena y olas, la navegación en hielo, deriva en hielo, surf en hielo o navegación en aguas duras, convierte la navegación en un deporte de invierno. Este tipo de navegación comenzó en los Países Bajos en el siglo XIX como un medio para cruzar lagos congelados en invierno, y ha crecido en popularidad como deporte recreativo desde que se introdujeron los veleros en hielo en la década de 1930.

Habilidades Y Condiciones Básicas De Navegación

Los conceptos básicos de la navegación son fáciles de aprender en un par de lecciones, pero su mejora puede llevar toda la vida. Hay cinco habilidades y métodos básicos para aprender sobre la navegación: navegación ambiental, equilibrio del bote, trimado delantero y de popa, posición central y buen rumbo.

  • Configuración de la vela: no puede llevar los veleros directamente al viento o corren el riesgo de detenerse (cuando prácticamente no hay viento en las velas). Dependiendo de su punto de navegación, la dirección de su barco en relación con la dirección del viento, se requieren diferentes configuraciones de navegación. Al escucharlo, puede configurar su vela principal: relaje la vela hasta que se agite a lo largo de la esponja vegetal, la parte más cercana al mástil, y luego tire hacia atrás hasta que termine el aleteo.
  • Equilibrio del barco: esto se conoce como el talón cuando el barco comienza a inclinarse en una dirección. Es importante mantenerse consciente del viento (¿está rastrillando?) Y la dirección de la vela para superar los talones y mantenerse en curso. Tenga en cuenta el peso a bordo y cómo se distribuye. Si el lado de babor de su bote se inclina, puede solucionarlo cambiando su peso (o el peso de la tripulación) al lado opuesto o al lado de estribor.
  • Ajuste delantero y trasero: el barco también debe estar equilibrado de principio a fin. En términos generales, la parte delantera del barco (proa) es ligeramente más alta que la parte posterior, y la distribución del peso corporal a bordo (usted y su tripulación) es clave para mantener el equilibrio. Si su bote es arrastrado al agua (un ejemplo de lo que sucede cuando la parte trasera del bote es demasiado baja), mueva su peso más cerca del centro del bote o al frente. Un bote adecuadamente equilibrado le permite navegar más rápido.
  • Posición lateral central: hay un delicado equilibrio entre su barco y el mar, y perderlo puede empujarlo fácilmente fuera de su curso. El tablero central, una pieza de madera, fibra de vidrio o metal (dependiendo de la composición de su barco), es una multa móvil debajo del casco. Puede arreglar cualquier deriva cambiándola en relación con su nivel de navegación.
  • El trayecto funcionó bien: ir del punto A al punto B no siempre es un traycto directo, especialmente si le llevan directamente al viento en un curso recto. La planificación de una ruta que lo llevará a su destino tan pronto como sea posible se llama «el trayecto perfecto». Esto generalmente se logra al virar una maniobra en la que el barco se dirige en zigzag, en dirección del viento.

Estas son sólo unas nociones básicas, que de nada sirven si no se ponen en práctica con responsabilidad y bajo la tutela de personas experimentadas. Un viejo lobo de mar podrá enseñarle mucho más en un día  de navegación, que meses y meses leyendo teoría en internet. Así que si siente la llamada del mar, no espere más y láncese a la aventura.

 

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