5 claves para la motivación personal después de episodios de trauma

En la vida pueden presentarse muchos momentos difíciles y un poco turbulentos, los cuales suelen poner a prueba la valentía, la resistencia y la fortaleza de aquellos que los afrontan. Sin embargo, hay ciertas ocasiones cuyas consecuencias pueden ser realmente traumáticas, haciendo aún más difícil iniciar ese proceso de motivación personal que lleve a una recuperación de estos episodios.

Luego de un episodio traumático, es importante que la víctima inicie un proceso de sanación que le permita reconectarse con su bienestar físico y mental, para así mantener una armonía espiritual que impida que las consecuencias de estos traumar puedan llegar a ser fatales.

Sobre este tema habla María Trusa a través de su sitio web, una mujer que, luego de haber pasado por diferentes episodios traumáticos que en algún momento de su vida la llegaron a afectar profundamente, hoy se dedica a brindar apoyo a todas aquellas personas que buscan una salida a los estragos que un trauma puede causar en cada aspecto de la vida.

En este artículo encontrará 5 claves que pueden servirle para encontrar esa motivación personal después de un episodio de trauma, las cuales puede poner en práctica cuando lo considere necesario.

¿Qué es la motivación personal?

Si bien se trata de un concepto bastante conocido en el mundo de la psicología, sobre todo cuando se trata de traumas y cuadros de depresión, hay muchas personas que desconocen lo que realmente significa y por qué es tan importante para la vida de cualquier persona, especialmente aquellas que han sufrido algún tipo de trauma.

Según María Trusa, la motivación personal se refiere a ese impulso que debe desarrollar una persona desde su interior, el cual la entusiasme a lograr cada una de sus metas y objetivos personales y profesionales, sin ningún tipo de emociones negativas que puedan impedir el logro de esas metas.

¿Por qué es importante la motivación personal?

Cuando una persona sufre una situación traumática, ya sea un accidente, la pérdida de un familiar o un amigo, o incluso un episodio de abuso, la mayoría de las veces suelen llenarse de sentimientos negativos que pueden llevar a un grave cuadro de depresión, disminuyendo esa motivación que les permite cumplir con cada una de sus tareas diarias, por muy simples que sean.

Ante este tipo de situaciones, es importante encontrar formas de aumentar esa motivación personal en la vida, puesto que las consecuencias de la pérdida de este maravilloso sentimiento pueden llegar a ser fatales, desarrollando en la víctima deseos de hacerse daño, cambios de humor repentino o impulsos suicidas.

¿Cómo aumentar la motivación personal después de un trauma?

Para poder aumentar los niveles de motivación personal en un individuo, existen varios ejercicios y técnicas que deben ponerse en práctica con regularidad, para así lograr que la víctima se reconecte con emociones positivas que le permitan revertir esos pensamientos negativos que pueden estar invadiendo su mente.

Algunas de las claves para recuperar la motivación personal luego de un trauma, según María Trusa, son las siguientes:

Aceptar la situación

A pesar de ser uno de los pasos más importantes, el hecho de aceptar que existe un trauma que debe ser trabajado para mejorar la motivación personal, suele ser particularmente difícil, sobre cuando la víctima se encuentra en un estado de negación, pese a los claros efectos negativos que ese trauma esté causando en su vida diaria.

Es importante hacer un ejercicio mental en el que la víctima acepte que está sufriendo un trauma por determinada situación, pero en lugar de rendirse a ese trauma, llenarse de energía para enfrentarlo y trabajar para superarlo poco a poco, hasta lograr esa motivación personal que pueda estar necesitando.

Realizar actividades recreativas

Mantener el cerebro ocupado es una de las mejores formas de contribuir en la superación de un trauma. Mientras más vueltas se le de en la cabeza a la situación que esté causando estragos emocionales a una víctima, peores serán las consecuencias en ella.

En este caso se pueden hacer todo tipo de actividades que permitan distraer a la persona de estos traumas, e incluso motivarla a través del desarrollo de sentimientos positivos como el gozo y la alegría. Desde ver una película, ir de compras, pasear en un parque, jugar algún juego de mesa, e incluso leer un libro, todas estas actividades pueden ser sumamente reparadoras.

Meditar al menos 10 minutos diarios

Científicamente se ha comprobado que la meditación es una de las actividades más eficaces al momento de liberar el cuerpo de todo tipo de energía y pensamientos negativos que puedan estar causando malestar en la vida de una persona.

A través de la meditación es posible reducir el estrés, el riesgo de depresión, e incluso mejorar la capacidad de concentración y atención, lo que sin duda alguna repercute en el desarrollo de esa motivación que puede ayudar a la víctima a sanar esos traumas personales.

Ejercitar el cuerpo regularmente 

El ejercicio es una de las mejores actividades que ayudan al cuerpo a librarse de toxinas y todo tipo de energías negativas que puedan estar causando estragos en la salud mental de una persona, como consecuencia de un trauma no superado.

Para María Trusa, el ejercicio ha sido una de las actividades que más le han ayudado a recuperar su cuerpo y mente de los traumas que vivió en el pasado, llenándose de energía para cumplir con cada una de las metas y objetivos que hoy en día ha alcanzado. Ella recomienda hacer un mínimo de 20 minutos de ejercicio físico diario.

Buscar ayuda profesional

Por último, pero no menos importante, es esencial que una persona busque ayuda profesional para la superación de un trauma. De esta forma, podrá acceder a herramientas concretas que le permitan recuperarse de estos episodios de desmotivación, con la guía de una persona que realmente conoce cómo ayudar en situaciones de este tipo.

Es importante tener presente que, por muy fuerte que pueda ser un trauma en la vida, las ganas de vivir y salir adelante tienen que ser mucho más grandes. María Trusa es un ejemplo de perseverancia, fortaleza y resiliencia. Su experiencia de vida es prueba fiel de que es posible sanar las heridas del pasado y, a través de la motivación personal, reescribir la vida para alcanzar cada una de las metas establecidas.

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