A menudo se piensa que para salvar un pequeño hay que renunciar a los viajes, las vacaciones o las compras más extremas. En realidad, hay muchos pequeños trucos en casa que pueden ayudarte a ahorrar un poco, sin tener que recurrir a equipos especiales o electrodomésticos sofisticados.
1. Ahorro de energía
La iluminación representa casi el 20% del consumo de energía . Por ello, recomendamos instalar «dimmers» para las luces en lugar de simples interruptores: de esta forma se puede ajustar la intensidad de la luz según las necesidades del momento, sin desperdiciar energía innecesariamente . Además, pintar las paredes de un color claro gana en brillo y consume menos luz eléctrica.
2. Cuidado con las bombillas
Reemplaza las bombillas de bajo consumo que ya tienes en casa por tipos de bajo consumo; u opta por bombillas led. Recuerda que limpiar lámparas y bombillas es fundamental : la suciedad absorbe la luz y oscurece el vidrio y sus superficies, por lo que es necesario tener una mayor intensidad de energía para lograr la iluminación deseada. Por último, ¡es muy importante recordar apagar las luces cuando salga de una habitación o cuando salga de casa!
3. No deje los electrodomésticos en espera
Dejar su televisor o computadora enchufados o en espera puede ser muy costoso. Una solución conveniente y eficaz podría ser conectar el dispositivo a un enchufe múltiple con un interruptor para desactivar todos los dispositivos al mismo tiempo cuando no se estén usando.
4. No abuses de la calefacción
Se estima que la temperatura ideal en la casa ronda los 20 ° C. Ajustando la temperatura a un nivel óptimo, sin exagerar, se puede ahorrar unos euros al año. Si no quieres instalar un termostato para regular la temperatura, intenta dejar las persianas abiertas durante el día: los rayos del sol calentarán las habitaciones de forma natural, lo mismo ocurre con las cortinas. Recuerda cerrar las puertas para calentar algunas habitaciones más rápido concentrando el calor.
5. Comprobación de la caldera
Una caldera sucia consume más. No espere a que se rompa o funcione mal para decidir hacer una revisión. Con un buen mantenimiento no solo se alarga la vida útil de la caldera, sino que también se reduce la factura del gas . Idealmente, sería una revisión por año, para mantener los problemas bajo control.
6. Aislar la casa
Las alfombras son la forma más sencilla de aislar la casa: ayudan a consumir menos energía y al mismo tiempo dan forma y calidez a los muebles.
7. No desperdicies el agua
Ya habíamos hablado sobre cómo limitar el desperdicio de agua en la vida cotidiana . Por lo general, recuerde siempre apagar el chorro de la ducha mientras se enjabona, o el grifo mientras se cepilla los dientes o se enjabona las manos. También sería mejor evitar tirar papel por el inodoro: ¡el 30% del consumo de agua es causado por esto!