Bella ciudad bolivarense, enclavada en los valles del río donde toma su nombre proveniente de una palabra autóctona castellanizada; no se sabe a ciencia cierta cuándo y de donde tomo el origen este nombre, pero nos hace suponer que el nombre primitivo debió imitar a la naturaleza en sus diversos sonidos los mismos que se unen y forman las palabras que representan el nombre de las cosas, obedeció quizás el nombre de Chimbo a sonidos naturales de nuestros medios.
Según la leyenda el cacique shaman que lo llamaban también guaman (lobo) de campo que gobernaba estas tribus y se hacía pasar como descendiente de los dioses y tenía que imitar la blancura de las nieves y confundirse con las nubes para atraer las lluvias y fertilizar los campos.
Chimbo fue fundado por Sebastián de Benalcázar en el año 1535 donde ascendió a ser el primer corregimiento español y fue francisco Pizarro de 1539 decidió ponerlo como paso importante en el camino real.
En la actualidad San José de chimbo es una pequeña ciudad con invaluable historia en sus calles estrechas y paisajes quebradizos, el desnivel del terreno permitió hacer en la ciudad varias azoteas en donde se pueden observar las casas de estilo colonial y tejadas; sus calles algunas serpenteantes y angostas guardan el calor humano e invita a la bohemia de quien lo visita.
Su parque central nació al igual que su cabildo en los 1860 cuando fue elegido cantón convirtiéndose así en uno de los más antiguos del Ecuador. Chimbo es un pueblo de gente trabajadora, fuente de microempresas artesanales y tejedoras, encontramos una rica gastronomía propia del lugar; así como sus hábiles constructores de juegos pirotécnicos muy renombrados en el Ecuador y también en otros lares del extranjero; excelentes alfareros y constructores de hollas(los que les valió el nombre de holleres), destacados en la armería localizada en Tambán y dulceros por excelencia.
En este hermoso cantón se puede visitar el santuario de la virgen del guayco, ascender al cerro Susanga de cuya cima se puede observar la mayor parte del callejón interandino en cuyas faldas se encuentra este hermoso cantón.
Oscar Sánchez M