La isla de La Tolita es uno de los lugares más enigmáticos del Ecuador ya que algunos historiadores creen que fue un gran centro ceremonial, a donde llegaban pobladores de toda la región para rendir homenaje a un gran cacique, al cual le elaboraban a mano hermosas piezas trabajadas en oro y en cerámica. Es una interesante zona arqueológica en la que existió una de las culturas precolombinas más antiguas del Ecuador.
Al llegar a este magnifico lugar lleno de cultura y tradición se puede encontrar pequeños pedazos de cerámica que sobresalen de la tierra. Poco a poco se puede ver entierros in situ, cerámicas precolombinas de entre 400 a.c a 600 d.c en medio de la selva.
El lugar cuenta con un museo de sitio administrado por la población en donde se puede apreciar máscaras, ralladores muñecos vasijas, oro y otros más, que causarán asombro al turista.
Pero los turistas no solo vienen a buscar rastros de civilizaciones antiguas, también se han cautivado por la impresionante naturaleza de la zona.Para llegar a La Tolita se debe hacer una travesía de 20 minutos en bote a través de los manglares más altos del mundo, apreciando durante el recorrido el sorprendente cruce sobre aguas azuladas y bajo un sol intenso, permite disfrutar además de un paisaje de manglares y aves marinas, se debe rodear la isla de los pájaros, hogar de cientos de especies de aves, y luego se llega a un pequeño caserío.
La Tolita es un destino turístico prácticamente virgen rodeado de naturaleza, tradiciones ancestrales, y cultura característica de Esmeraldas, este lugar poco a poco se está abriendo a la presencia de viajeros quienes quedan satisfechos con la visita de esta hermosa isla llamada la Tolita.
Mildred Carchipulla