El Blog de Santillana

Conducir una moto es una experiencia que deja indiferente; es una auténtica aventura que no se puede comparar con la experiencia de conducir otro vehículo.

Conducir una moto requiere preparación y precaución por parte del conductor: lo más importante es minimizar los riesgos, porque cualquier error o descuido puede ser fatal. cada año, muchos motociclistas murieron en accidentes de tráfico, en su mayoría debido a incidentes en la carretera y de fin de semana, algunos de ellos debidos al alcohol. Aunque en principio no vas a usar la moto para ir a la universidad con dos copas de más ni en fin de semana, siempre hay que estar alerta, nos recomiendan los amigos de seguro.mx que me han dado unos consejos prácticos.

Tanto si te consideras un motorista novato como un veterano de las dos ruedas en la carretera, te insto a que te tomes muy en serio los siguientes consejos para negociar correctamente y con seguridad un giro en moto. Ten cuidado:

Mantener la calma

Una de las reglas de oro del motociclismo es conducir dentro de tus propias capacidades y conocimientos. Cada piloto debe saber lo que puede hacer y hacer las cosas al ritmo que sabe. No intentes demostrar nada a nadie, ni siquiera a ti mismo. Te arriesgas a probarlo una sola vez porque no hay vuelta atrás.

En relación con la bicicleta

La posición correcta de la bicicleta es crucial. Durante la conducción, la postura del piloto debe ser relajada y cercana a la motocicleta. El cuerpo no debe estar demasiado erguido y las rodillas deben estar cerca del depósito para mejorar la aerodinámica. Los codos no deben estar ni cerca ni lejos del cuerpo para garantizar la movilidad de los brazos.

Mirar al horizonte

Otra técnica básica de manejo de motocicletas es mirar el punto más lejano de la trayectoria. De este modo, el motorista amplía su campo de visión y tiene más tiempo para anticiparse a las situaciones de peligro.

Si sigues este consejo, podrás analizar el tipo de giro y el estado de la carretera y «pintar» el giro: primero en tu cabeza, luego en el asfalto. Es aconsejable dibujarla inmediatamente y luego corregirla en la mitad de la curva.

Ejecución perfecta

En primer lugar, es importante respetar siempre el límite de velocidad. En las curvas debes adaptar tu velocidad a la pista. Los conductores experimentados dicen que lo más importante es el enfoque: sólo una buena preparación permite conseguir una línea perfecta. Por eso, la aproximación a la esquina es fundamental. Lo más difícil en una moto es saber a qué velocidad entrar en la curva y cuánto inclinar la moto. La caída puede depender de esa decisión.

No te apresures

Inclínate, pero no te inclines. Como conductor, reduzca la velocidad deteniéndose y volviendo al final de su carril para tener el mayor radio de giro posible.

En el punto de giro -la parte más lenta de la maniobra- deja de frenar e inclina la moto. Si te ves obligado a inclinarte, tu velocidad no es suficiente.

En el interior de la curva, abra el acelerador sólo para medir la aceleración y mantenga una velocidad constante durante toda la línea.

Manténgase en su carril

Manténgase siempre en su carril al girar. En ningún caso te introduzcas en el carril contrario, ni con tu moto ni con tu cuerpo: en caso de colisión frontal, las posibilidades de salir vivo son casi nulas.

En caso de imprevistos (grava suelta, baches u obstáculos), el motorista que mantiene la distancia de seguridad puede reaccionar a tiempo ante tales infortunios.
Si has elegido la línea correcta, la salida de una curva es el punto más cómodo y relajado en el que puedes enderezar la moto y acelerar gradualmente. Hasta el próximo movimiento.

Además, ten siempre un seguro de moto, puedes encontrar páginas como segurosmotos.com.mx donde encontrarás el que más se adapte a ti, pero a parte de ser obligatorio, puede salvarte la vida.