Estudiar no es algo que guste a todos los niños, pero los padres pueden conseguir que poco a poco esto se convierta en una rutina con resultados favorecedores en su rendimiento escolar. Si la aprenden desde la escuela, será más fácil que los conocimientos en el colegio se asimilen más rápido.
Aquí un par de vídeos de soporte al tópico estudiar y aprender, ver:
“Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo”.
– Benjamín Franklin
“Con mis maestros he aprendido mucho; con mis colegas, más; con mis alumnos todavía más”.
– Proverbio hindú
“Lo más importante que aprendí a hacer después de los cuarenta años fue a decir no cuando es no”.
– Gabriel García Márquez
“Hay alguien tan inteligente que aprende de la experiencia de los demás”.
– Voltaire
“Aprender es como remar contra corriente: en cuanto se deja, se retrocede”.
– Edward Benjamin Britten
“Me lo contaron y lo olvidé; lo vi y lo entendí; lo hice y lo aprendí”.
– Confucio
PAUTAS DE ORGANIZACIÓN Y ESTUDIO
Tomado de Guía Mensual para socios del Club de Lectores El Universo a septiembre de 2013.
Club| SEPTIEMBRE del 2013
“Estudiar no es algo que guste a todos los niños, pero los padres pueden conseguir que poco a poco esto se convierta en una rutina con resultados favorecedores en su rendimiento escolar. Si la aprenden desde la escuela, será más fácil que los conocimientos en el colegio se asimilen más rápido.
TIEMPO DE ESTUDIOS
Involucrarse en las tareas escolares de los hijos es una forma de demostrar Interés por las actividades que realizan. Los momentos de estudio también deben ser situaciones en las que los padres demuestren su apoyo y los motiven para conseguir buenos resultados. Lograrlo no es fácil, pero poco a poco se puede hacer que los pequeños muestren interés por estudiar día a día.
No es necesario que pases largas horas junto a ellos para hacer deberes, puedes hacerlo demostrándoles habilidades de organización y de estudio, explicándoles un problema complicado o animándolos a tomar un descanso cuando llevan cierto tiempo trabajando en tareas escolares.
Motivarlos es importante porque así lograrán concentrar su esfuerzo en aprender y estudiar. Para motivar a un niño los padres y maestros deben conocerlo. Los jefes de hogar deben asistir a las reuniones del centro educativo para estar pendiente del desempeño del pequeño en el aula y de lo que el maestro espera conseguir también de los padres,
En el hogar, debes asegurarte de que el niño cuente con un área adecuada que tenga buena iluminación y que tenga a la mano los materiales necesarios para poder elaborar las tareas diarias.
Preocúpate en poner un horario regular para que tus pequeños hagan tareas y estudien o repasen contenidos progresivamente.
Desde muy pequeños enséñales que es mejor estudiar día a día para que en el momento que lleguen las pruebas solo deban recordar lo aprendido. Cuando tengan muchas tareas que realizar o mucho contenido por estudiar, enséñales a distribuirlas en diferentes partes para que logren llevarlas a cabo paulatinamente.
Ese plan de trabajo que les enseñarás, debe incluir 15 minutos de descanso por cada hora de trabajo preferiblemente. Ten claro que tu hijo no aprenderá nada si no realiza por sí mismo sus tareas.
Ayudarlo no significa que debas hacer todo, sino que lo guíes y le enseñes cómo hacer sus deberes y cumplir con sus obligaciones. El ejemplo también cuenta como una forma de enseñar, así que si tú te organizas bien con tus tareas y tienes hábitos como la lectura, él también lo tomará como un ejemplo.
Elogia sus éxitos con detalles como colgando en la refrigeradora un examen o un trabajo artístico que haya realizado, además, comenta sus logros académicos con parientes. Si observas que tu hijo tiene problemas con el aprendizaje, habla con sus maestros y descarta también problemas visuales por falta de lentes.
Puntos a considerar*
PRESTAR ATENCIÓN EN CLASE:
Los buenos hábitos empiezan desde el salón de clases, así que debes enseñarles a que concentren su atención a todas las clases y a las explicaciones del profesor. También es fundamental que sepan distinguir si el espacio donde están ubicados es el adecuado para recibir las clases, si tienen niños que hacen mucha bulla o no permiten que escuche las indicaciones es preferible que hable con el profesor para que se los cambie de puesto.
LOS APUNTES FACILITAN EL ESTUDIO:
Enséñale a tu hijo a anotar las explicaciones que el profesor dé en la clase. Procura que sean con buena letra para que cuando lleguen a la casa puedan leer y repasar. Otra nota importante es clasificarlos por asignatura para cuando llegue e! momento del examen repasen ordenadamente los contenidos.
PLANIFICAR EL ESTUDIO CON ANTICIPACIÓN:
No dejes ni permitas que estudien un día antes de la prueba pues eso implicará que ambos se agobien y tu hijo no comprenda debidamente el contenido. Si les enseñas el repaso diario, será más fácil que el día anterior del examen solo refresquen los conocimientos ya adquiridos. Anota también las fechas de entrega de trabajos para que planifiques los horarios de estudio diario.
DIVIDIR EL ESTUDIO EN PARTES:
Si no has alcanzado a hacer que tu hijo estudie diariamente para un examen, divide contenidos durante los días previos para que no tenga mucho para el final. No olvides que también bebes darle descanso y tiempo libre para que se distraiga.
SI NECESITAN AYUDA, BRÍNDASELAS:
Si no entiende la materia, habla con el maestro para ver qué dificultades presenta y cómo pueden solucionar ei inconveniente que se está presentando. Si es necesario, pide que le expliquen nuevamente o que despejen las dudas que tienen sobre el tema.
DORMIR BIEN DESPUÉS DE ESTUDIAR:
El descanso es súper importante, si has seguido tu plan de estudio, puedes hacer que repase y que se dedique a dormir. Si no lo has hecho, aprovecha la tarde y procura que tu hijo se dedique en la noche a dormir.
* Lo destacado en cursiva en una ayuda para la lectura y no estaba en el texto original.
Aquí frente a los novatos presentamos nuestro homenaje de por vida y a la eternidad para Don Carlos Fuentes.
Hace pocos días, el escritor y ensayista mexicano Carlos Fuentes recibió un emotivo homenaje de cuerpo presente en el Palacio de Bellas Artes, en donde se expresaron profundos comentarios sobre su obra y persona.
El recinto cultural por excelencia en la ciudad de México, se convirtió en el templo idóneo para que académicos, gobernantes y cientos de lectores le dieran el más merecido adiós al destacado escritor.
«Carlos Fuentes Macías (Panamá, 11 de noviembre de 1928 – † México, D. F., 15 de mayo de 2012) fue uno de los escritores más conocidos de finales del siglo XX, candidato al Premio Nobel de Literatura en reiteradas ocasiones y autor de novelas y ensayos, entre los que destacan Aura, La muerte de Artemio Cruz, La región más transparente y Terra Nostra.
Sus distinciones, entre otras, el Premio Rómulo Gallegos en 1977, el Cervantes en 1987, el Premio Príncipe de Asturias de las Letras en 1994 y en 2009 la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica. Fue nombrado miembro honorario de la Academia Mexicana de la Lengua en agosto de 2001.» – Wikipedia
Carlos Fuentes falleció a los 83 años de edad en el hospital Ángeles del Pedregal, debido a una hemorragia interna provocada por una úlcera rota.
Para los novatos o no se presentan producciones educativas en homenaje a Carlos Fuentes Macías. Ver:
Carlos Fuentes: Un homenaje de por vida y eterno, ESPOL, 2012.05.22.
Entre muchas de sus premiaciones, destacamos el reconocimiento de la Fundación Roosevelt (Middelburg) al mexicano Carlos Fuentes. A la ceremonia asistieron la reina Beatriz de Holanda, el príncipe heredero Guillermo Alejandro, su esposa Máxima, y el primer ministro Jan Peter Balkenende. Carlos Fuentes recibió el premio de la libertad de expresión. Ver video:
“El hombre más poderoso es el que es dueño de sí mismo».
– Séneca
“Sólo una cosa convierte en imposible un sueño: el miedo a fracasar».
– Paulo Coelho
“Reconocer lo bueno que ya tenemos en nuestra vida es la base de la abundancia”.
– Eckhart Tolle
«El sabio puede sentarse en un hormiguero, pero sólo el necio se queda sentado en él».
– Proverbio chino
«Hay tres grupos de personas: los que hacen que las cosas pasen; los que miran las cosas que pasan y los que se preguntan qué pasó».
– Nicholas Murray Butler
“Una persona usualmente se convierte en aquello que cree que es. Si yo sigo diciéndome a mi mismo que no puedo hacer algo, es posible que yo termine siendo incapaz de hacerlo. Por el contrario si yo tengo la creencia que sí puedo hacerlo, con seguridad yo adquiriré la capacidad de realizarlo aunque no la haya tenido al principio”.
– Gandhi
Difusión: 2012.03.01.
“Están desnudas tus 50 hojas, tus 100 mínimas páginas, dulces, blancas, que las repaso al aire como pétalos de una flor delicada que tengo que escribir” – Rafael Alberti / citado por Paul César Carrión Mero (ESPOL).
¿Porque tengo que escribir?
“Aquí volcaré las palabras que he escrito, las líneas que han salido de mi alma, sentimientos, rabias, razones, felicidad, orgullo, amor, desamor, experiencias, cuentos, cosas que tenía que escribir, no me pregunten por qué”. – Cabezal de “Porque tengo que escribir” (http://porquetengoqueescribir.blogspot.com)
Las rutinas nos obligan a decir: mañana, más luego, ya mismo. La rutina de escribir dice calladita, ¡HAZLO YA!
¿Dónde estoy? Estoy perdido.
Esta es una situación común y natural al “querer” emprender a escribir.
Los escritos en general se dan luego de algunas batallas, la primera es la fácil (encender el ordenador, tomar el lápiz), la segunda es la más compleja (digna de héroes) y tiene que ver con enfrentarse al más sensible contendor: LA HOJA DE PAPEL EN BLANCO.
La pelea con la hoja es una de las más duras, Pero nos enfrentamos casi a diario ante el blanco de una hoja u ordenador.
¿Pero qué es en realidad una hoja de papel en blanco?
David Alvarado en el sitio nos contesta a la interrogante recién referida, ver:
“Una hoja de papel /espacio en blanco delimitado únicamente / por los limites que tengamos en la imaginación / podemos escribir la historia mas maravillosa / podemos plasmar sentimientos con letras tratar de encontrar un camino mientras escribimos
una hoja de papel / puede ser un punto de encuentro entre el hoy y el ayer.
Yo encontré en una hoja de papel/ el consuelo cuando quería llorar un receptor para mis quejas / y para todas esas cosas que no podía contar / o tuve miedo de decirlas cuando pude / y me las tuve que guardar.
Un día las hojas de papel se enfrentaron / con la hoja electrónica de un ordenador / el viejo lapicero que antes usé / se convirtió en un teclado multifuncional / pero en el plano mental / la maquina de escribir historias seguía funcionando.
¿Esto es una hoja de papel?
Sí lo es… pero antes de utilizar mis dedos para escribir / acá siempre me gusta tener un cuaderno a la mano / una especie de archivo / con ideas regadas por todos lados / y anotaciones en el ultimo rincón.
Hoy soy parte de la hoja de papel… Todos somos comunicadores algunos de sangre otros de profesión y a algunos otros como yo nos gusta imaginar a veces que podemos escribirnos sobre la piel las verdades que queremos expresar”. – David Alvarado
“Porque el proceso de escribir es solo trabajo nuestro y realmente debemos luchar contra nosotros mismos.
La victoria sobre uno mismo comienza cuando contamos con una idea. Y luego somos capaces de generar pensamientos.
Para pensamientos negros o no, una hoja en blanco. La hoja los purifica, los pule, los endulza y más, hasta nos educan (dígase: nos purifica, nos pule, nos endulza y más).
Los pensamientos no dichos, son pensamientos que pesan, que entorpecen, que se incrustan y quitan sitio a los nuevos.
Serás vertedero de pensamientos si no hablas o escribes sobre ellos”. –Maru
Al rayar una hoja de papel hemos dado un gran paso para registrar una parte de nuestras historias y vivencias. Una hoja escrita, en sí, es un tesoro que hay que cuidar, darle mantenimiento.
Luego de lo escritos vendrán otras batallas, muchas de ellas ligadas a la revisión. En las batallas de revisión se dan perdidas de párrafos enteros (divisiones), a veces perdemos a los mejores soldados (aquellos que demarcaron la hoja).
Cualquiera que sea nuestro auditorio nuestras hojas escritas requieren de algunas revisiones
¿Y la victoria?
La victoria es un escrito digno de ser leído.
Guerras por escribir se han dado (se dan) en todos los continentes y ganadores hay por miles (no dijo millones). Así es muy fácil tomar de los ganadores el arte de triunfar sobre una hoja de “papel” en blanco, que no tiene ninguna arma contra nosotros.
Ricardo Delgado nos relata sus experiencias a llenar con sentido y en forma escrita el espacio de la hoja en blanco:
«Intento satisfacer mi necesidad de escribir, de llenar ese hueco en el cerebro y en el corazón que solo a los amantes de la escritura se les ha forjado y solo el maravilloso mundo de las letras puede llenarlo.
Respiro profundo, cuento hasta diez, hasta cien y mi cerebro segrega endorfinas: ¡Oh sí! Me siento mejor. Escribir cuesta ¿Será por ello tan fabuloso?» – Ricardo Delgado
Sus escritos son parte de su historia, de su vida y son sus obras que legamos a nuestros potenciales lectores.
El escribir en sí es un trabajo que requiere del querer personal de compartir algo con uno mismo o con los demás. Para escribir por lo menos un párrafo se requiere de idea(s), sin embargo la(s) buena(s) ideas se rescriben. ¿Cómo capturar nuestras ideas?
Para tener una opción sobre cómo capturar (registrar) una idea, véase el enlace a:
¿Cómo registrar una idea?, CSECT, ICQA, 2010.11.22, no. 1/1.
Las ideas surgen de las circunstancias en que nos encontremos, pero nuestras ideas ya elaboradas pueden dar forma a nuevas circunstancias, “Una persona no puede directamente escoger sus circunstancias, pero si puede escoger sus pensamientos e indirectamente -y con seguridad- darle forma a sus circunstancias”. – James Allen
Así que es instante de recordar a Jasmine Gillman quien expresa: “No esperes por el momento preciso. Empieza ahora. Hazlo ahora. Si esperas por el momento adecuado, nunca dejarás de esperar.” Lo anterior se puede llevar al proceso de empezar a escribir.
La Comisión Europea (CE) considera que su personal debe redactar muchos tipos distintos de documentos. Cualquiera que sea su género (legislación, un informe técnico, actas de reuniones, un comunicado de prensa o un discurso) -un documento claro siempre será más eficaz y más fácil y rápidamente comprendido.
Para ayudar a moros y cristianos la CE hace público una guía (más consejos que reglas) para escribir, la misma que pretende ayudarnos a escribir con claridad tanto en su propio idioma como en cualquiera de las demás lenguas oficiales, todas las cuales están vigentes hoy en día!.
Los consejos de la CE hay que ponerlos en práctica y se deberá tener en cuenta a sus potenciales lectores y también el objetivo de su documento. Para acceder –en español- a lo recién referido llegar a:
En la entrada del 2011.06.18 en mi blog se hallaran además contenidos sobre: ¿QUÉ MISMO ES ESCRIBIR? , en palabras de Martín Javier Oviedo Hernández, “ESCRIBIR ES UN ACTO HIPNÓTICO” por Gabriel García Márquez, así como también “LA LIBERTAD Y LOS LIBROS” de Mario Vargas Llosa. Y más una severa afirmación de José Saramago, a saber: “No busques trabajo: escribe”.
Véase asimismo el siguiente enlace, sobre el mismo contenido de “REGLAS PARA ESCRIBIR TEXTOS”
Se puede escribir fructíferamente cuando gozamos de libertad, aunque hay quienes han escrito (y bien) cuando no han gozado de la misma, de ahí que la afirmación SOMOS LIBRES PERO ESTAMOS ATADOS A NUESTROS ACTOS, tiene vigencia. Una ilustración relacionada a nuestros actos se presenta a continuación y tomado de: http://www.elpodium.org/somos-libres-pero-estamos-atados-a-nuestros-actos.html
“Un viejo cacique de una tribu estaba teniendo una charla con sus nietos acerca de la vida.
Él les dijo: – ¡Una gran pelea está ocurriendo dentro de mí!… ¡es entre dos lobos! –
-Uno de los lobos es maldad, temor, ira, envidia, dolor, rencor, avaricia, arrogancia, culpa, resentimiento, inferioridad, mentiras, orgullo, egolatría, competencia, superioridad-.
– El otro es Bondad, Alegría, Paz, Amor, Esperanza, Serenidad, Humildad, Dulzura, Generosidad, Benevolencia, Amistad, Empatía, Verdad, Compasión y Fe.
Esta misma pelea está ocurriendo dentro de ustedes y dentro de todos los seres de la tierra-.
Lo pensaron por un minuto y uno de los niños le preguntó a su abuelo: – ¿Y cuál de los lobos crees que ganará? –
El viejo cacique respondió, simplemente… – El que tú alimentes -.
El proceso de escribir abarca en sí un deseo de servir (a uno mismo y a los demás) y conlleva varios componentes: responsabilidad (revisar), entusiasmo, serenidad, persuasión.
Escribir pasa por revelar historias, analizarlas, sacar conclusiones, observar con precisión, escudriñar, ver lo que detrás de las esquinas y muchos otros verbos de acción relacionados con la descripción, aplicación, análisis, síntesis y evaluación.
Para sacar varias líneas e incluso párrafos, conviene contestar en nuestros escritos respuestas a las siguientes interrogantes:
Ya en e l siglo pasado el novelista británico, Rudyard Kipling (1865-1936) sentenció: “Seis honrados servidores me enseñaron cuanto sé; sus nombres son cómo, cuándo, dónde, qué, quién y por qué”.
La clave para relatar por escrito citamos a Camilo José Cela quien afirma “Para escribir sólo hay que tener algo que decir”. Paralelamente, Francisco Umbral nos recuerda que “Escribir es la manera más profunda de leer la vida”.
El concepto y la actitud de escribir son esenciales para el estudio y la ciencia, es parte del proceso la referencia escrita como un punto fundamental de la investigación.
Más sobre la importancia de escribir en el proceso de la investigación podrá encontrar en el siguiente enlace relacionado con la Charla académica del Dr. Paúl Carrión M. a los alumnos del curso de Ciencia e Investigación / P001/ ICM / 15 Diciembre de 2008.
Respecto a la actitud (también para escribir) citamos a Thomas Jefferson, quien afirma:
«Nada sobre esta tierra puede detener al hombre que posee la correcta actitud mental para lograr su meta. Nada sobre esta tierra puede ayudar al hombre con la incorrecta actitud mental.»
Para los novicios en el proceso de escribir tomamos lo dicho por Noah benShea que matiza no confundirse y sentirse menos (o más) y nos invita a no confundir al equipar lo que se posee con lo que uno es, ver su frase:
“No confundas el tener menos con ser menos, tener más no significa ser más; tampoco confundas lo que posees con quien eres”. – Noah benShea
Esperarnos que lo reseñado le permita hallarse donde usted se encuentra, a no estar perdido para escribir y que favorezca a desarrollar una actitud completa para comenzar a escribir, revisar, relaborar y dar a conocer lo que se encuentra en su interior.
El final de un escrito depende de su inicio, aquí recordamos dos lemas del St. Benedict School, el primero “El Fin depende del Principio”. El segundo reza “No para uno mismo”.
Al escribir siempre podemos mejorar el principio y lógicamente el final. Muchas veces el proceso de registrar “No para uno mismo”.
Para no escribir no hay que culpar a nadie, extrapolamos a Pablo Neruda en su escrito “NO CULPES A NADIE”, donde expresa:
“…Aprende de los audaces, de los fuertes, de quien no acepta situaciones, de quién vivirá a pesar de todo, piensa menos en tus problemas y más en tu trabajo, y tus problemas sin eliminarlos morirán…”
El CSECT es bueno para todos. El CSECT le hace bien.
Obtenga lo bueno en vida, vía CSECT.
Más sobre ¿Qué mismo es el CSECT? se puede apreciar en la siguiente entrada:
“Los problemas son oportunidades para demostrar lo que se sabe”. – Arthur WELLINGTON
“La vida no es sino una continua sucesión de oportunidades para sobrevivir”. – Gabriel GARCÍA MÁRQUEZ
«Un hombre sabio se procurará más oportunidades de las que se le presentan». – Francis BACON
“La redistribución de la riqueza es menos importante que la redistribución de las oportunidades”. – Arthur H. VANDENBERG
“No pienses en los problemas como dificultades, sino como oportunidades de acción”. – Anónimo
Difusión 2012.01.22
Llego el Concurso Semestral de Emprendimiento, Ciencia y Tecnología, con nosotros desde el 23 al 27 de enero de 2012.
¿Dónde lo vemos?
Plazoleta aledaña a FEPOL, Entre FEPOL y nuevo edificio de Biblioteca, abajo del CSI. Todos están invitados a la feria CSECT 2011 ii, a partir del 23 de enero de 2012, 5 días.
Para esta edición se removieron muchos obstáculos, llego el plazo para siempre recordar que:
“La dificultad es una excusa que la historia nunca acepta”. – Edward R. Murrow
“A nadie le faltan fuerzas; lo que a muchos les falta es voluntad”. – Víctor Marie Hugo
La voluntad, perseverancia, esfuerzo nos graban en la historia, y con la ayuda de nuestros talentos nos llamaran INNOVADORES.
El mensaje a los novatos que aún les falta un poquito del proyecto va aquí:
«La dificultad es una excusa que la historia nunca acepta» para novatos CSECT, 2012.01.22.
“Escribir es ordenar las ideas que bombardean la mente, como pólvora colorida y humeante, que describen, formulan, enseñan, codifican. Representan con letras, signos y símbolos: historias, sentimientos, emociones, teorías, creencias, verdades y mentiras.
Al escribir fluye una carga de energía que se transforma en una huella visible.
La palabra escrita tiene la capacidad de cambiar, programar, reeducar y enriquecer al lector.
Si al menos una persona se interesa por leer lo escrito, se ha cumplido el fin, las letras se han convertido de simple garabato a comunicación inteligente.
El arte de escribir es armar el más complicado rompecabezas, donde al final se ve el mejor de los paisajes, reflejado a través de las palabras, de múltiples colores, ordenadas por la mente, buscando la perfección”.
– Martín Javier Oviedo Hernández.
Dos respuestas para Marín Javier:
“Escribir es una manera de crecer desde el interior, de desglosar sentimientos que a veces con palabras no encuentras argumentos, y sobretodo es una manera de aprender con la lectura de un buen escritor.
La palabra escrita del que sabe expresar, llega al alma del que entiende, sin saberlo explicar”.
– Toñi
“Un lápiz y papel para ser feliz. … Las palabras se amontonan en la mente y quieren aflorar en forma de rima. … Rápido busco el carbón y doy rienda suelta a la emoción.
A mí me encanta escribir…me dejo llevar por mis sentimientos y al final, leo todo y a veces me pregunto de dónde salió tanto…simplemente, sale del corazón.
No importa si me leen o no, pero yo vuelco en el papel todos mis sentimientos, los más escondidos y es un placer hacerlo”.
– lalinda007
Un experto colombiano en escribir bien y diverso afirma que escribir es un acto hipnótico, ver:
“ESCRIBIR ES UN ACTO HIPNÓTICO”
“La escritura trata de hipnotizar al lector para que no piense, sino solamente en el cuento que le estas contando y eso requiere de una enorme cantidad de clavos, tornillos y bizarras para que no despierte. Eso es lo que llamamos la carpintería, esa es la técnica de contar, esa es la técnica de escribir o la técnica de hacer una película.
Una cosa es la inspiración, otra cosa es el argumento, pero ¿cómo contar ese argumento y convertirlo en una verdad literaria que realmente atrape al lector? Eso sin la carpintería no se puede.
Cuando uno atrapa a un lector logra comunicarle un ritmo respiratorio que no se puede romper, porque si rompe despierta, entonces cuando uno ya logra ese ritmo la escritura de pronto encuentra que hay una frase coja, hablo en términos de ritmo, entonces yo llego a poner un adjetivo, dos adjetivos, de tal manera que no rompa ese ritmo.
Se encuentra un adjetivo que no debería estar ahí, pero esta para que no despierte, eso es la carpintería de la escritura”.
– Gabriel García Márquez.
Lo arriba presentado proviene de la siguiente producción: Leer Escribir Comprender (a partir del minuto ustedes encuentran a Don Gabriel García Márquez en la referencia), ver:
Para escribir es necesario leer y leer en libertad, un aporte significativo para los novatos es la publicación de Editorial Alfaguara (22/04/2011) del texto completo del discurso de Mario Vargas Llosa en la 37º Feria del Libro de Buenos Aires (21/04/2011) que aparece bajo el siguiente título:
«LA LIBERTAD Y LOS LIBROS»
“Agradezco a los organizadores de la Feria del Libro de Buenos Aires honrarme con la invitación a ocupar esta tribuna el día de la inauguración. He tenido ya ocasión de participar en ella hace algunos años y me alegra saber que ha ido creciendo y atrayendo cada vez a más editores, libreros y lectores hasta convertirse en una de las ferias de libro más importante mes en todo el ámbito de nuestra lengua.
No me extraña nada que haya ocurrido así. Desde la primera vez que pisé Buenos Aires, hace de esto cerca de medio siglo, advertí que esta ciudad y los libros tenían una afinidad recóndita, comparable a la que sólo había advertido antes en París, y que, al igual que esta última, Buenos Aires era una ciudad de librerías -modernas y anticuarias-, de cafés literarios, de escribidores y lectores, donde todo letraherido se sentía inmediatamente en su casa. No es por eso nada raro que uno de los más grandes creadores de nuestro tiempo, Jorge Luis Borges, fuera un porteño y que se pueda decir de su extraordinaria obra que toda ella es como la exhalación imaginaria emanada de una biblioteca, institución en la que Borges, recordemos, en uno de sus más bellos textos, materializó el Paraíso.
Agradezco también a los organizadores de este certamen haber resistido las presiones de algunos colegas y adversarios de mis ideas políticas, para desinvitarme. Y extiendo mi agradecimiento a la Presidenta, señora Cristina Fernández de Kirchner, cuya oportuna intervención atajó aquel intento de veto. Ojalá esta toma de posición en favor de la libertad de expresión de la mandataria argentina se contagie a todos sus partidarios. Este episodio, me parece, más allá de lo anecdótico, plantea un asunto interesante y actual al que no me parece inadecuado abordar en el marco de este certamen con una breve exposición que se podría titular: «La libertad y los libros».
Manuscritos, impresos y, ahora, digitales, los libros representan la diversidad humana (mientras no sean expurgados, claro está). A condición de que puedan participar en ella sin discriminación, cortes, sin censura, los libros de una Feria del Libro son, en pequeño formato, la humanidad viviente, con lo mejor y lo peor que ella tiene: sus creencias, sus fantasías, sus conocimientos, sus sueños, sus amores y sus odios, sus prejuicios, sus pequeñeces y grandezas.
Ningún espejo retrata mejor a esa colectividad de hombres y mujeres que conforman las diversas tradiciones, culturas, etnias, lenguajes, mitos, costumbres, modos y modas del fenómeno humano. Esa extraordinaria variedad desaparece cuando, abandonando la superficie, gracias a los libros nos sumergimos en lo profundo hasta llegar a aquellas raíces o denominadores comunes de la especie, pues allí descubrimos lo que hay de solidario y semejante por debajo de aquella frondosa variedad: una condición, unos sentimientos, unos anhelos, unas alegrías y unos miedos que establecen una identidad recóndita sobre las diferencias y distancias que la historia ha ido forjando entre razas, pueblos y culturas a lo largo de los siglos.
Los libros nos ayudan a derrotar los prejuicios racistas, étnicos, religiosos e ideológicos entre los pueblos y las personas y a descubrir que, por encima o por debajo de las fronteras regionales y nacionales, somos iguales en el fondo, que los «otros» somos en verdad «nosotros» mismos. Gracias a los libros viajamos en el espacio y en el tiempo, como hizo Julio Cortázar en La vuelta al día en ochenta mundos sin salir de su biblioteca, y comprobamos que, con todos sus matices y variantes, la humanidad es una sola y compartida.
Podemos comparar el mundo de los libros que en estos momentos nos rodea con un bosque encantado. Ellos están allí, quietos, inertes, silenciosos, como los árboles y las plantas de las fantásticas historias infantiles, esperando la varita mágica que los anime. Basta que los abramos y celebremos con sus páginas esa operación mágica que es la lectura para que la vida estalle en ellos convocada por la hechicería de sus letras y palabras, y un surtidor de ideas, imágenes y sugestiones se eleve del papel hacia nosotros nos impregne, arrebate y traslade a otra vida, a menudo más rica, coherente, intensa y entretenida que la vida verdadera, en la que a menudo las rutinas embrutecedoras cotidianas nos dejan apenas resquicios para la exaltación y la felicidad.
La vida de los libros nos enriquece y nos transforma. Nos hace más sensibles, más imaginativos y, sobre todo, más libres. Más críticos del mundo tal como es y más empeñados en que cambie también él y se vaya acercando a los mundos que inventamos a imagen y semejanza de nuestros deseos y sueños.
Por eso, los libros son un testimonio inapelable de las carencias y deficiencias de la vida, aquellas que incitan a los seres humanos a crear mundos de fantasías y a volcarlos en ficciones para poder tener aquello que la vida que vivimos no nos da.
El viaje al corazón de ese bosque encantado de los libros no es gratuito, un paseo divertido y sin secuelas. Es un viaje que deja huellas en el sentimiento y la inteligencia del lector, la comprobación de que el mundo real está mal hecho pues no basta para colmar nuestros anhelos. ¿Para qué inventaríamos otros mundos si con éste nos bastara? Es imposible no salir de un buen libro sin la extraña insatisfacción de estar abandonando algo perfecto para volver a lo imperfecto y empezar a mirar el entorno con cierto desánimo y frustración.
Nada ha hecho que el mundo progrese tanto desde los tiempos de la caverna primitiva hasta la era de la globalización como ese viaje a lo imaginario que acompaña a hombres y mujeres desde su más remoto pasado y del que da testimonio inequívoco el mundo vertiginoso y laberíntico de los libros.
No es sorprendente, por ello, que los libros hayan despertado, a lo largo de la historia, la desconfianza, el recelo y el temor de los enemigos de la libertad, de quienes se creen dueños de las verdades absolutas, de todos los dogmáticos y fanáticos que han sembrado de odio y violencia zigzagueante el curso de la civilización.
La Inquisición lo vio clarísimo: los libros deben ser examinados y purgados por censores estrictos para asegurar que sus contenidos se ajusten a la ortodoxia y no se deslicen en ellos apostasías y desviaciones de la doctrina verdadera. Dejarlos prosperar sin esa camisa de fuerza de la censura previa sería poblar el mundo de heterodoxias, teorías subversivas, tentaciones peligrosas y desafíos múltiples a las verdades canónicas. Esta mentalidad llevó a decidir que todo un género literario -la novela- fuera prohibida durante los tres siglos que duró la colonia en todas las posesiones españolas de América.
Durante trescientos años no se pudo editar ni importar ficciones en las colonias americanas. El contrabando se encargó de que muchas novelas circularan en nuestras tierras, felizmente. Pero una de las perversas -o tal vez felices- consecuencias de esta prohibición fue que, en América Latina, como la ficción fue reprimida en el género que la expresaba mejor -las novelas-, y coma los seres humanos no podemos vivir sin ficciones, éstas se la arreglaron para contaminarlo todo -la religión, desde luego, pero también las instituciones laicas, el derecho, la ciencia, la filosofía y, y por supuesto, la política-, con el previsible resultado de que, todavía en nuestros días, los latinoamericanos tengamos grandes dificultades para discernir entre lo que es ficción y realidad. Eso ha sido muy beneficioso en los dominios del arte y la literatura, pero bastante catastrófico en otros, en los que sin una buena dosis de pragmatismo y de realismo -saber diferenciar el suelo firme de las nubes- un país puede estancarse o irse a pique. Los comisarios políticos han reemplazado en la vida moderna a los inquisidores de antaño.
Vez que se ha apoderado de un gobierno un fanático religioso, ideológico o un caudillo megalómano que se cree dueño de la verdad absoluta, los libros se han visto sometidos a purgas, recortes y vejaciones para tratar de evitar que lo que ellos encarnan mejor que nadie -la diversidad humana, la variedad de ideas, creencias, puntos de vista, costumbres y tradiciones- se divulgue y contradiga la visión dogmática, excluyente y autoritaria entronizada. Nazis, fascistas, comunistas, caudillos militares o civiles enceguecidos por los espejismos de las verdades absolutas han tratado a lo largo de toda la historia y en todas las geografías del planeta de domesticar y embridar el espíritu creativo, insumiso y crítico -que ha sido siempre el motor del cambio-, pero, por fortuna, siempre han fracasado. Dejando, eso sí, en el camino una miríada de víctimas – torturados, encarcelados y asesinados- que, pese a la represión y a las persecuciones, mantuvieron siempre viva aquella llama de libertad que anida, como un alma secreta, en el corazón de los libros.
Leer nos hace libres, a condición, claro está, de que podamos elegir los libros que queremos leer, y que los libros puedan escribirse e imprimirse sin inquisidores ni comisarios que los mutilen para que encajen dentro de las estrechas orejeras con que ellos aprisionan la vida. Defender el derecho de los libros a ser libres es defender nuestra libertad de ciudadanos, el precioso fuego que la atiza, mantiene y renueva.
Una de las mejores tradiciones de la Argentina ha sido ser un país de libros, escritores y lectores. Yo lo recuerdo muy bien, pues en mi infancia y mi adolescencia se nutrieron de revistas y libros (y, añadiré, películas y canciones) que se producían y editaban en este país y se difundían por todos los rincones de América. Por ejemplo, llegaban puntualmente a Cochabamba, la ciudad boliviana donde viví hasta los diez años. Recuerdo muy bien la llegada periódica de Leoplán para el abuelo, el Para ti que leían mi madre y mi abuela y en Billiken que yo esperaba como maná del cielo. Más tarde, de universitario en San Marcos, en Lima, conocí la literatura más renovadora y moderna, (de Faulkner a Thomas Mann, de Joyce a Sartre, de Camus a Forster, de Eliot a Hemingway, gracias a las traducciones que editoriales como Losada, Sudamericana, Emecé, Sur y otras publicaban y distribuían por todo el continente. Como innumerables jóvenes latinoamericanos de mi generación puedo decir por eso que debo buena parte de mi formación literaria a esa pasión por los libros que anida en el corazón de la cultura argentina.
Hago votos porque esa hermosa tradición se renueve y fortalezca y que sea la mejor expresión de ello esta Feria del Libro de Buenos Aires.
Muchas gracias.” – Mario VARGAS LLOSA
Como se puede apreciar del texto del discurso de Don Mario, al escribir y decir hay que disponer de valores, tomar una posición y defenderla, pelear por las reivindicaciones, todo esto es más difícil sino se comprende y se descifra la importancia de los libros y la literatura.
En la siguiente producción se “narran por escrito” alrededor de 70 reglas para escribir y el paquete tiene la finalidad de apoyar a los novatos en el proceso de escribir. Ver:
Reglas para escribir textos (casi 70) para novatos, ESPOL, ICQA, CSECT, 2011.06.15.
Daniel Cassany al explicar la importancia del concepto de literacidad crítica nos hace ver cómo han cambiado las formas de leer y escribir, aunque usemos las mismas palabras, aquí el enlace para escuchar su exposición de 7 minutos, que valen la pena, acceder mediante enlace:
A las reglas referidas podemos añadir algunas más, entre ella, una personal que ahora comparto con ustedes.
Recorra mentalmente una situación que haya vivido y para algunos segmentos de la misma elabore etiquetas que representen una identificación cualitativa o cuantitativa de los trancos coexistidos. Los siguientes etiquetas provienen de un día común ciudadano: ambición (1), fracaso (2), cínico (3), precio (4), egoísmo (5), tribulaciones (6), disfraces (6), humildad (7), estrellas (8), artista (9), sí mismo (10). Ahora que las etiquetas mantienen relaciones con otras, incluso con las no registradas.
Los lectores, de quererlo, pueden apreciar lo que Oscar Wilde escribe hace mucho tiempo atrás en torno a etiquetas arriba enlistadas – las referencias se presentan en paréntesis -, ver:
(1 y 2) La ambición es el último recurso de los fracasados.
(3 y 4) Es cínico quien conoce el precio de todo y el valor de nada.
(5) El egoísmo no es vivir como uno quiere, sino pedir a los demás que vivan como uno quiere.
(6) A veces, las que nos parecen tribulaciones amargas no son sino bendiciones disfrazadas.
(7) Si me elogian recibo un lección de humildad, si me insultan sé que he tocado las estrellas.
(9 y 10) El verdadero artista es un hombre que cree absolutamente en sí mismo porque es absolutamente él mismo.
Todo lo aquí presentado es un modesto aporte para fomentar entre nuestros novatos el oficio de escribir (dentro y fuera de la ESPOL), el mismo que es una faena que incluye cuerpo, mente, corazón y herramientas cotidianas, pero que es un esfuerzo que requiere voluntad, disciplina, tiempo y sobre todo el arte de revisar y alguito más.
Agradecimientos a todos los que dieron vida al CSECT 5ta Edición (23 – 27 de agosto 2010)
El elemento vida lo contenemos todos los mortales. Vida y muerte van juntas, sin embargo ahora somos conscientes solo de lo que hacemos en vida. Lo que haremos en muerte es un tema para los aficionados de la investigación muy, pero muy, sofisticada.
El elemento vida tiene tres componentes, a saber: pasado, presente y futuro.
El pasado es para sacar los componentes del aprender para la vida, para el presente. Sin embargo no hay presente si futuro.
El futuro hay que visualizarlo, y para aquello tenemos que investigar. Esto, a partir de aprender a investigar.
¿Quiénes investigan?
Investigamos todos, pero los resultados dependen de nuestra capacidad de emprender e innovar.
En realidad, emprender, investigar e innovar son las aristas de un triangulo que se fundamenta en el material realidad. Expreso el término “realidad” por que casualmente es a la “realidad” la que tenemos que comprender y cambiar.
¿Para qué estamos viviendo?
Vivimos para cambiar la realidad con el esfuerzo propio y el apoyo ajeno, es decir: con el trabajo en conjunto, de todos.
Las líneas de esta entrada están dedicadas a todos nuestros novatos que investigaron, innovaron y emprendieron en el Concurso Semestral de Emprendimiento, Ciencia y Tecnología (CSECT) que tuvo lugar en su quinta edición desde el 23 al 27 de agosto del presente año.
El CSECT es vida y como tal agradecemos a todos los -ya- miles de estudiantes que dieron vida a las cuatro anteriores ediciones del evento CSECT: centro de rendición de cuentas en términos de exponer somos orgullosos de ser ecuatorianos, de ser ESPOL en cuerpo y espíritu. Colocando muy en alto: HECHO EN ESPOL.
Las preguntas que planteamos a los novatos al escuchar sus propuestas dentro del Concurso del 23 al 27 rondaban sobre sí habían tocado las llamas del emprendimiento, innovación e investigación.
Resaltamos, en mayúsculas y en negrillas las palabras de Richard Schrock quien plantea al público en general que para llegar a ser buenos científicos, los estudiantes deben ser apasionados, trabajadores, curiosos y observadores. Además, que deben saber discriminar a la hora de elegir sus caminos de investigación.
Elegir los caminos de investigación es lo que da a los novatos el CSECT, elegir entre la gama de sus intereses y los intereses de la sociedad, y dar un “producto” que nos beneficie a todos, en primer lugar a nuestra educación que requiere de más calidad, es especial dedicada a nuestras sentidas carencias.
Sí advertimos los vídeos y los trabajos presentados pueden ustedes constatar que los novatos han tocado las llamas de la pasión, trabajo a presión, de la curiosidad, de la observación hacia el mercado y al final discriminaron en una primera instancia: esto es lo que ahora puedo presentar en mi CSECT.
Los vídeos referidos pueden ser evaluados al acceder al canal:
A los pronto no novatos: Muchas gracias por sus aportes, bajo las reglas de la auto gestión y os solicitamos no dejar de investigar y eso significa: mejorar sus productos y servicios, como lo expresaron para servir a la comunidad. E ir más allá de lo pedido en clases.
Aquí, expreso mi gratitud a todos los profesores del ICQA, sus directivos por el apoyo brindado al CSECT, esto desde ya seis semestres atrás. A los padres de familia que emprendieron con sus vástagos, a los expertos y profesores de colegios que nos visitaron. Aquí, recordemos a Goethe cuando afirmo: «Sigue la mente de un maestro, caminar con él es avanzar.»
Matizo que en cada edición del CSECT están presentes todas las demás. Esto en paralelo, a la sentencia de Juan Ramón Jiménez quien nos recuerda que en cada sentido están los otros cinco.
La última edición supero todas las expectativas propuestas: llegaron miles de estudiantes de los colegios de la región, decenas de padres de familia, expertos y sobre todo, a nosotros nos lleno de orgullo rendir cuenta a los profesores de colegios que palparon que sus “chicos” se están formando bajo las líneas de investigar, emprender e investigar de acuerdo a intereses compartidos con la comunidad.
Para todos novatos o no, profesores o no, a todos hago llegar algunos pensamientos sobre la vida y sus colaterales, esto mediante frases de pensadores ilustres.
Esperemos que le demos vida a nuestra vida, elaborando más vida para nosotros y los demás.
Recordemos que la vida vino con un don “regalado”, pero ya recibida vale mucho, pero cuesta en realidad mucho más.
De nuestra calidad de vida depende la vida de los demás y viceversa.
¡Viva la ESPOL!
Algunas frases sobre la vida y la “muerte”:
“Cada día es una pequeña vida.”
-Quinto Horacio Flaco
“La vida exige a todo individuo una contribución y depende del individuo descubrir en qué consiste.”
-Viktor Frankl
“Solamente una vida dedicada a los demás merece ser vivida.”
-Albert Einstein
“La vida no es más que un tejido de hábitos.”
-Henry F. Amiel
“La vida es la constante sorpresa de saber que existo.”
-Rabindranath Tagore
“Vida sin fiestas es como largo camino sin posadas.”
-Demócrito de Abdera
“Para la mayoría de nosotros la verdadera vida es la vida que no llevamos.”
-Oscar Wilde
“El que no valora la vida no se la merece.”
-Leonardo Da Vinci
¿Qué sabe el pez del agua donde nada toda su vida?
-Albert Einstein
“La vida es un arco iris que incluye el negro.”
-Yevgeny Yevtushenko
“Temer al amor es temer a la vida, y los que temen a la vida ya están medio muertos.”
-Bertrand Russell
“La vida no es significado; la vida es deseo.”
-Charles Chaplin
“La vida es lucha.”
-Eurípides de Salamina
“Aprendí que no se puede dar marcha atrás, que la esencia de la vida es ir hacia adelante. La vida, en realidad, es una calle de sentido único.”
-Agatha Christie
“¿Qué es la vida? Un frenesí. ¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una ficción; y el mayor bien es pequeño; que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son.”
-Pedro Calderón de la Barca
¿No es la vida cien veces demasiado breve para aburrirnos?
-Friedrich Nietzsche
“Si nos atrevemos a creer en la vida eterna, a vivir para la vida eterna, veremos cómo la vida se torna más rica, más grande, libre y dilatada.”
-Benedicto XVI
“Dormía y soñaba que la vida era bella; desperté y advertí que la vida era deber.”
-Immanuel Kant
¡Ojalá vivas todos los días de tu vida!
-Jonathan Swift
“Dormía…, dormía y soñaba que la vida no era más que alegría. Me desperté y vi que la vida no era más que servir… y el servir era alegría.”
-Rabindranath Tagore
“Una vida bien escrita es casi tan rara como una vida bien vivida.”
-Thomas Carlyle
“A vivir se aprende toda la vida, y toda la vida se ha de aprender a morir.”
-Lucio Anneo Séneca
“Internet es positivo porque nos une, nos conecta. Incluso a las personas mayores. El estar conectado nos prolonga la vida y no solamente añade años a la vida, sino vida a los años.”
-Luis Rojas Marco
“La vida consiste en la comprensión de la verdad.”
-Leon Tolstoi
“Si no se tomara la vida como una misión, dejaría de ser vida para convertirse en infierno.”
-Leon Tolstoi
“Al final, lo que importa no son los años de vida, sino la vida de los años.”
-Abraham Lincoln
“Quien no ama la vida, no la merece. ¿Qué viene a ser esta vida, sino un breve camino para la muerte?”
-Lope de Vega
“No se tome la vida demasiado en serio; nunca saldrá usted vivo de ella.”
-Elbert Hubbard
“Todo el mundo trata de realizar algo grande, sin darse cuenta de que la vida se compone de cosas pequeñas.”
-Frank Clark
“No podemos arrancar una página del libro de nuestra vida, pero podemos tirar todo el libro al fuego.”
-George Sand
“En el fondo son las relaciones con las personas lo que da sentido a la vida.”
-Karl Wilhelm Von Humboldt
“Carpe Diem (aprovecha el día presente). Palabras que nos recuerdan que la vida es corta y debemos apresurarnos a gozar de ella.”
-Quinto Horacio Flaco
“Amar a la vida a través del trabajo, es intimar con el más recóndito secreto de la vida.”
-Khalil Gibran
“Lo mismo es nuestra vida que una comedia; no se atiende a si es larga, sino a si la han representado bien. Concluye donde quieras, con tal de que pongas buen final.”
-Lucio Anneo Séneca
“La vida es un aprendizaje de renunciamiento progresivo, de continua limitación de nuestras pretensiones, de nuestras esperanzas, de nuestra fuerza, de nuestra libertad.”
-Henry F. Amiel
“La vida no es sino una continua sucesión de oportunidades para sobrevivir.”
-Gabriel García Márquez
“La vida es dos pasos adelante y uno atrás.”
-Oriol Bohigas
“La vida es un gorro; unos se lo ponen, otros se lo quitan.”
-Proverbio judío
“Cuanto menos se lleve a cabo, más corta parece la vida.”
-Karl Wilhelm Von Humboldt
“Entre la fe y la incredulidad, un soplo. Entre la certeza y la duda, un soplo. Entre la certeza y la duda, un soplo. Alégrate en este soplo presente donde vives, pues la vida misma está en el soplo que pasa.”
-Omar Khayyam
“Hay una ley de vida, cruel y exacta, que afirma que uno debe crecer o, en caso contrario, pagar más por seguir siendo el mismo.”
-Norman Mailer
“En la vida no hay clases para principiantes; en seguida exigen de uno lo más difícil.”
-Rainer María Rilke
“Todos somos aficionados. La vida es tan corta que no da para más.”
-Charles Chaplin
“La vida es un juego del que nadie puede retirarse, llevándose las ganancias.”
-André Maurois
“En dos palabras puedo resumir cuanto he aprendido acerca de la vida: Sigue adelante.”
-Robert Lee Frost
“No recibimos una vida corta, sino que nosotros la acortamos. No somos de ella indigentes, sino manirrotos.”
-Lucio Anneo Séneca
“Vuestros hijos no son vuestros hijos: son los hijos y las hijas de las ansias de vida que siente la misma vida.”
-Khalil Gibran
“Vivir la vida de tal suerte que viva quede en la muerte.”
-Santa Teresa de Jesús
“Una vida lograda es un sueño de adolescente realizado en la edad madura.
-Alfred Victor de Vigny
“Si la muerte no fuera el preludio a otra vida, la vida presente sería una burla cruel.”
-Mahatma Gandhi
“Nuestra vida está tan llena que actúa cuando no hacemos nada.”
-Gastón Bachelard
“Los hombres mediocres, que no saben qué hacer con su vida, suelen desear el tener otra vida más infinitamente larga.”
-Anatole France
“Lo mejor es salir de la vida como de una fiesta, ni sediento ni bebido.”
-Aristóteles
“Lo característico de la vida actual no son la inseguridad y la crueldad, sino el desasosiego y la pobreza.”
-George Orwell
“La vida es una serie de colisiones con el futuro; no es una suma de lo que hemos sido, sino de lo que anhelamos ser.”
-José Ortega y Gasset
“La vida es una obra bastante buena, salvo el tercer acto, el último.”
-Tennessee Williams
“La vida es una especie de juego de azar, donde todo el mundo piensa que el de al lado sabe qué está pasando.”
-Barbara Probst Solomon
“La vida es un tránsito; el mundo es una sala de espectáculos; el hombre entra en ella, mira y sale.”
-Demócrito de Abdera
“La vida es tan corta y el oficio de vivir tan difícil, que cuando uno empieza a aprenderlo, ya hay que morirse.”
-Ernesto Sábato
“La vida no es aceptable a no ser que el cuerpo y el espíritu vivan en
buena armonía, si no hay un equilibrio natural entre ellos y si no experimentan un respeto natural el uno por el otro.”
-David Herbert Lawrence
“Disfruta de la vida. Hay mucho tiempo para estar muerto.”
– Hans Christian Anderen
Ahora un videoclip que nos viene bien para “ir a vivir”. Adelante novatos, ver:
Nosotros como blog (red dentro y fuera de la ESPOL) estamos en deuda con una entrada dedicada a la mujer, esto en relación al 8 de marzo, el Día Internacional de la Mujer.
¿Cómo surgió esta deuda con nuestras queridas lectoras y con sus admiradores?
Debemos confesar que se nos pegó el teclado virtual con todas sus consonantes y tildes etc. Y como siempre a nuestro favor el trabajo de los columnistas, en este caso David Samaniego Torres, quien en el diario El Universo del miércoles 10 de marzo del 2010 nos da conocer un trabajo de Ángel Guevara (emisor) bajo el título de «El dulce sabor de una mujer exquisita.»
Por la belleza y dulzura manifiestas en «El dulce sabor de una mujer exquisita.» nos permitimos dar lectura en voz alta al trabajo referido, para luego detallar una visión adicional sobre ese afable sabor añorado.
A continuación la lectura al trabajo de David Samaniego:
El dulce sabor de una mujer exquisita
«Esta entrega no busca atrapar lectores. Transcribo párrafos que no son míos; me llegaron como tantos otros que aparecieron luego en este espacio privilegiado de EL UNIVERSO.
Ángel Guevara es el emisor; ustedes, sobre todo las damitas, las receptoras. Lean despacio estas líneas, se las recomiendo:
Si aún no ha pasado el bisturí por tu piel; si no tienes implantes de silicona en alguna parte de tu cuerpo; si los rollitos no te generan trauma; si nunca has sufrido de anorexia; si tu estatura no afecta tu desarrollo personal; si cuando vas a la playa prefieres divertirte en el mar y no estar sobre una toalla durante horas; si crees que la fidelidad sí es posible y la practicas; si sabes cómo se prepara un arroz; si puedes preparar un almuerzo completo; si tu prioridad no es estar divina a como dé lugar; si no te levantas a las 04:00 para llegar primera al gimnasio; si puedes salir con ropa de gimnasia tranquila a la calle un domingo sin una gota de maquillaje en el rostro, estás en vía de extinción.
Una mujer exquisita no es aquella que más hombres tiene a sus pies, sino aquella que tiene uno solo que la hace realmente feliz. Una mujer hermosa no es la más joven, ni la más flaca, ni la que tiene el cutis más terso o el cabello más llamativo, es aquella que con tan solo una franca y abierta sonrisa y un buen consejo puede alegrarte la vida.
Una mujer valiosa no es aquella que tiene más títulos, ni más grados académicos; es aquella que sacrifica su sueño temporalmente por hacer felices a los demás. Una mujer exquisita no es la más ardiente (aunque si me preguntan a mí, todas las mujeres son muy ardientes… Los que estamos fuera de foco somos los hombres).
Una mujer interesante no es aquella que se siente halagada al ser admirada por su belleza y elegancia, es aquella mujer firme de carácter que puede decir no. Y un hombre exquisito es aquel que valora a una mujer así. Que se siente orgulloso de tenerla como compañera. Que sabe tocarla como un músico virtuosísimo toca su amado instrumento. Que lucha a su lado compartiendo todos sus roles desde lavar platos y atender tripones hasta devolverle los masajes y cuidados que ella le prodigó antes.
La verdad, compañeros hombres, es que las mujeres en eso de ser ‘muy machas’ nos llevan gran recorrido. ¡Qué tontos hemos sido -y somos- cuando valoramos el regalo solamente por la vistosidad de su empaque!
Mujeres y hombres aplaudirán estas líneas y se sentirán muy felices; otro tanto, quizá, no va a estar de acuerdo con estos conceptos. No me culpen, amigas y amigos; se atribuyen a Gabriel García Márquez estos acertados piropos. Me he permito mínimas variantes en puntuación para una mejor comprensión; lo demás pertenece al genio.
En horas de rabias adormecidas y de enconos despiertos, estas líneas sirvan para tonificar nuestras existencias. ¡QUE VIVA LA VIDA!
Hasta aquí el trabajo de Ángel Guevara y David Samaniego.
Que otras cosas muy bellas apreciamos, creo que todos, en la mujer exquisita.
La mujer exquisita se divierte, hace lo que le gusta, desea dar sus regalos al mundo, ser la mejor en lo que hace y busca a quien delegar un gran resto de asuntos.
¿Qué miedos tiene una mujer exquisita?
Su mayor miedo, a nuestro criterio, es estar imposibilitada a no poder entregar todo su talento al mundo.
La mujer exquisita quiere hacer el uso total de sus potenciales, crear una masa de valor para los demás, hacer uso completo de su creatividad, sus dones, ayudar a la mayor cantidad de gente posible, cambiar el mundo, cambiar la vida de millones de personas.
A la mujer exquisita le gusta el desafío, la libertad, pero sobre todo la diversión, en pocas palabras, ella «no tiene barreras».
La razón por lo que la mujer exquisita, es como es, se radica en haber transitado por el largo camino del desarrollo personal.
Este es el mapa de aquel ser maravilloso: tomar riesgos, aprender, fracasar, crecer, crear valores, crear y multiplicar la diversión. Esto puede ser desafiante, cansado, demandar mucha energía, consumir mucho tiempo, pero con aquello será una mujer exquisita que vive a plenitud de tal manera que puede contribuir a la vida de mucha gente.
Para finalizar, aquí un par de frases sobre las mujeres exquisitas de María José Molina M:
El valor que tiene una mujer comienza por ella misma, no por los demás.
Debes empezar por ti misma, tú vales mucho como mujer, madre, esposa o hija.
Y no puede faltar la Madre Teresa de Calcuta cuando pide a la mujer que no se detenga:
«Cuando no puedas correr trota, cuando no puedas trotar camina, cuando no puedas caminar usa el bastón,…, Pero nunca te detengas.»
Nuestra mujer politécnica novata se presentó de las maneras más exquisitas en el Concurso Semestral de Emprendimiento, Ciencia y Tecnología (CSECT) que se realiza semestralmente en el ICQA de la ESPOL. El concurso está dedicado a la elaboración de productos y servicios con sus respectivas muestras tomando en cuenta las medidas pertinentes para servir a la sociedad, la salud en general y el medio ambiente, esto por parte de todos los estudiantes que cursan la materia de Química General I en su componente práctico.
Gracias por la colaboración a dos mujeres muy especiales Adriana Jiménez y María José Molina y a todas las mujeres por existir y endulzar nuestras vidas y mostrarnos el océano de la felicidad.