El desayuno es la comida más importante del día. Recuerda que al levantarte llevas casi diez horas en ayuno, por lo que una de las primeras sugerencias es tomar dos vasos de agua a temperatura normal o tibia, muchos sugieren añadirle el jugo de un limón para arrastrar todos los residuos que pudieren haber quedado adheridos en las paredes de nuestro aparato digestivo.
Comer variado y saludable en las primeras horas es vital ya que aporta al cuerpo la mayor parte de nutrientes y energías que lo van a hacer funcionar de manera correcta durante la jornada, aumentando la capacidad física máxima, resistencia al esfuerzo, fuerza muscular y sobre todo, el poder de concentración y aprendizaje.
Decir que no hay tiempo para desayunar, que quieres bajar de peso y que mejor aprovechas para dormir un poco más, son decisiones erradas. La primera comida del día es vital, un desayuno debe ser generoso y de calidad porque contribuye a tener un buen estado de salud.
Para desayunar existe una gran variedad de lácteos que pueden alternarse cada día, leche (entera, deslactosada o de almendras), yogurth, cereal, pan integral, quesos tiernos y blancos, frutas (aporta fibras y minerales), avena, huevos, aguacates, frutos secos y otros.
Te aseguro que si empiezas el día con estas sanas recomendaciones, de forma paulatina sentirás vigor y energía que repercutirán en un excelente día.